Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El sacerdote Jaime Vargas Ruiz, de la Diócesis de Socorro y San Gil, enfrentará un juicio por presunto acto sexual violento contra un menor de edad. La audiencia preparatoria se realizará el próximo 1 de octubre en el Juzgado Penal del Circuito de Moniquirá, Boyacá. Los hechos ocurrieron en 2007, cuando Vargas Ruiz tenía 36 años y la víctima, apenas 16 años.
El abuso, según la denuncia, sucedió en una finca en Chitaraque, Boyacá, propiedad del sacerdote, mientras Vargas Ruiz estaba asignado a la parroquia San Judas Tadeo de Bogotá. La víctima, quien rompió su silencio casi 13 años después, presentó su denuncia en 2020 ante la Fiscalía y el obispo de Socorro y San Gil, monseñor Luis Augusto Campos Flórez.
El sacerdote Vargas Ruiz fue suspendido de sus funciones en 2020, después de que se iniciara una investigación interna en el Tribunal Eclesiástico, organismo del cual él mismo había sido presidente. En 2024, este tribunal determinó su culpabilidad y lo expulsó del estado clerical, tras encontrarlo responsable de un "delito contra el sexto mandamiento con un menor", refiriéndose al mandamiento bíblico que prohíbe el adulterio.
La Fiscalía presentó en mayo de 2023 un escrito de acusación con base en los testimonios de la víctima, sus familiares y varios peritajes psicológicos y forenses. El sacerdote, quien ocupó importantes cargos dentro de la diócesis, podría enfrentar una condena de entre 4 y 9 años de prisión si es hallado culpable por la justicia ordinaria.
La víctima ha solicitado que el expediente del Tribunal Eclesiástico sea remitido al tribunal penal para colaborar en la investigación. Además, ha hecho pública su historia para animar a otras víctimas a denunciar, ya que tiene conocimiento de al menos tres casos más de abuso que habrían ocurrido en municipios cercanos.