Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En Colombia, las cifras revelan un aumento significativo en el número de personas que acuden a las notarías para cambiar el género en su documento de identidad.
Así lo confirma el más reciente informe del Grupo de Inteligencia de Negocios y Estadísticas Institucionales de la Superintendencia de Notariado y Registro, entidad que encontró un notable incremento en los casos de cambio de género, de masculino a femenino.
Según la información reportada a la SNR por las 920 notarías del país, entre enero de 2023 y abril de 2024, un total de 916 personas realizaron correcciones en el campo denominado ‘componente sexo’ del registro civil de nacimiento.
De ellas, 641 (69,97%) cambiaron de masculino a femenino, mientras que 275 (30,02%) pasaron de femenino a masculino. Esto significa que, durante los últimos 16 meses, el número de personas que modificaron su sexo, de masculino a femenino, fue más del doble de aquellos que cambiaron de femenino a masculino.
“Estas cifras representan un avance significativo en el reconocimiento de los derechos de los colombianos que no se sienten identificados con su sexo biológico. Es la forma en la que se les facilita el uso de documentos que reflejen su identidad de género, sin necesidad de someterse a procedimientos médicos invasivos”, afirmó el superintendente de Notariado y Registro, Roosvelt Rodríguez Rengifo.
De acuerdo con el funcionario, en el escenario regional Bogotá lideró este trámite, con 172 casos (18,77%); seguida por Antioquia, con 123 (13,42%); Valle del Cauca, con 112 (12,22%); Santander, con 53 (5,7%); y Boyacá, con 47 (5,1%).
En Colombia, la posibilidad de cambiar el componente sexo en los documentos de identidad se formalizó en 2015, con la promulgación del Decreto 1227. Esta disposición estableció el procedimiento para que las personas transgénero pudieran modificar el sexo en su registro civil de nacimiento y en su cédula de ciudadanía.
El derecho a la identidad de género se desprende de la autonomía personal, el libre desarrollo de la personalidad y el reconocimiento a la dignidad humana. Sobre esta base, el Estado reconoce la importancia de la autodeterminación y permite a los colombianos vivir y ser reconocidos legalmente, de acuerdo con su identidad.
