Resumen
Japón, tras participar y ser vencido en la Segunda Guerra Mundial, se convirtió en una potencia económica gracias a su disciplina y el apoyo de Estados Unidos. Hoy en día, es un país pacifista, a pesar de las amenazas constantes de Rusia y Corea del Norte.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Por: José Caicedo Solano
Japón no participa en la primera guerra mundial, que sucedió entre 1914 y 1918, siendo una gran potencia de Asia casi desde los años de 1865, con su poderío marítimo, que viene a ser molestado y hasta usurpado por los Estados Unidos, en los años de la primera confrontación mundial, en cuanto a meter las narices económicas en un mercado muy amplio para los gringos que era casi monopolizado por los nipones. La verdad, Japón para los años treinta, del siglo veinte, tenía una población de 73 millones de habitantes, con una extensión territorial de 377 mil kilómetros cuadrados, que, comparado con Colombia de 1.242.000 kilómetros cuadrados, en esa fecha solo tenía 12 millones de habitantes.
El emperador de la nación del sol, Hirohito, era un muchacho, “un pobre pingo”, que los militares lo endiosaron para la sumisión del pueblo, en donde lo mostraron como un dios, que no se podía mirar a los ojos, y el pueblo se comió el cuento, lo mismo que los militares de rango medio y bajo, mientras los grandes generales, si eran conscientes que eran ellos los que tenían el poder en sus manos, y van sacando los mandos civiles del gobierno, para establecerse ellos en todos los frentes de la nación, siendo la imperialista del continente, la más llamativa.
Esta avanzada de los uniformados se empieza a dar en 1927 y en los años de 1937, ya invaden a Manchuria, comienza la gran invasión a China, con lo que se dice, que la primera guerra mundial aparece en ese año, y no el 1 de septiembre de 1939, que es la arrancada de la guerra de Europa, con la invasión de Alemania a Polonia.
Japón participa en la segunda guerra mundial que va de 1939 hasta 1945 y pierde conjuntamente con las otras dos potencias del eje, que eran Alemania e Italia. Recordemos qué, en el mes de agosto de 1945, le “afrijolan” las bombas atómicas nunca antes estalladas en ningún país, y que solo lo hicieron los gringos en otras latitudes a modo de experimento, con menor carga de potencia y radiación.
El país queda totalmente destruido, vencido, pero en las negociaciones de paz, dejan durmiendo tranquilo al emperador dios de los nipones y hasta el día de hoy lo tienen los japoneses como figura de tradición, a la par de las familias de la nobleza británica con el “bobo” Carlos como rey de Inglaterra y la “primera amante”, Camila Parker. Los Estados Unidos mandan a gobernar al Japón, diciendo que les da la mano para su recuperación económica y social, al general más condecorado de toda la historia de los gringos, El general Douglas MacArthur.
Japón en pocos años llega a ser nuevamente una potencia mundial, mandando a sus ejecutivos jóvenes a estudiar y copiar las tecnologías de occidente, principalmente de Inglaterra y Estados Unidos, y las afianzó y las superó como pensamiento japonés. Se cree que lo que más ayudó a ese país, fue la consciente disciplina de la población, desde el más humilde hasta el primer ministro. Su tradición fue casi de un juramento a Dios, de no querer saber más de la guerra, por lo cual la opinión mundial lo llama como el país más pacifista del siglo XXI. Sin embargo, hay dos “culebras” que amenazan su territorio: Rusia con el loco Vladimir Putin y Corea del Norte con el “recatreloco” Kim Jong Un, un “chino”, de solo 41 años, que ejerce como dictador de esa nación.
Por lo que se observa, entonces desde el año 2022, Japón con su primer ministro a la cabeza, señor Shigeru Ishiba, de 68 años, el movimiento de ojos del emperador y el grupo de gobierno civil, llevan una cruzada de armamento, de grandes proporciones, casi a la altura de las grandes potencias.
La opinión pública de la nación la acepta como medida de protección, más no como imperio invasor. Japón es potencia mundial en tecnología, inteligencia artificial y poder de trabajo. No necesitan que una gran mujer les diga: “A trabajar vagos”.
*Contador público. Asesor empresarial.