Señor empresario

Análisis. Los cambios económicos por ley, casi naturales, deben ir siempre adelante, hacia arriba o con un mayor valor. Si se dan en un sentido inverso o desaceleración o depresión, causa una muerte económica o desaparición de gran parte de un medio establecido. No podemos llegar a lo que pregonan los tartajos socialistas, en donde una funcionaria ministra del incompetente Petro, hablaba con énfasis de cocinar con leña, cuando estamos en la era de tener energía atómica, que, puliéndola, puede servir para parrillar buenos asados. La inflación es un elemento natural de la economía, que guía hacia un dinamismo, porque donde las cosas valieran lo mismo siempre, sería igual que en el paraíso terrenal, vivieran solamente Adán y Eva eternamente.

Tiene que haber más y mejores en todos los campos, incluyendo más efectivo en circulación a lo moderno, a través de los bancos y plataformas de pagos. Eso genera una calidad en el servicio y bienestar social que hace que el precio suba y por lo tanto el resultante es la inflación moderada. Llevemos siempre dentro de nuestros conocimientos, una consecuencia, que todo será mayor año tras año. Pero ese mayor valor debe tener un precio razonable, o de lo contrario, si podemos hablar, que ese bien se ha puesto caro y ese si es gran inflación.

Los ríos pueden tener mucha agua, pero mientras no se salgan de su cauce, no producirán inundaciones, esto es, inflaciones. Los aumentos salariales son las corrientes de los ríos, que tienen más agua, pero mayor riqueza ictiológica. Mayor ingreso, mayor consumo Por: José Caicedo Solano. *Contador Público- Asesor empresarial.