Resumen
La Policía Nacional de Colombia descubrió más de un kilogramo de marihuana y 22 gramos de cocaína en las pertenencias de tres guardias del centro penitenciario de Pasto. Las investigaciones sugieren que los guardias facilitaban el tráfico de drogas dentro de la cárcel.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En una reciente operación en el centro penitenciario de Pasto, ubicado en Nariño, la Policía Nacional descubrió más de un kilogramo de marihuana y 22 gramos de cocaína entre las pertenencias de tres guardias del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).
La intervención, llevada a cabo en colaboración entre la dirección del centro y la Policía Nacional, tuvo lugar el sábado 27 de julio por la noche. La investigación reveló serias deficiencias en el control interno de la institución. Durante la inspección a los casilleros del personal de custodia, las autoridades hallaron 1,218 gramos de marihuana y 22 gramos de cocaína en los objetos personales de los guardias arrestados.
Las primeras indagaciones sugieren que los guardias implicados facilitaban el tráfico de drogas dentro de la cárcel, permitiendo que las sustancias ilícitas circularan por el recinto bajo su vigilancia. La información proporcionada por el Inpec indica que las drogas confiscadas fueron entregadas a la Fiscalía General de la Nación, que será la encargada de procesar a los acusados judicialmente.
Los guardias arrestados son Yovanny López Zambrano, con 21 años de servicio; Danilo López Zambrano, con 14 años de antigüedad; y Jhon Alexander Cadena Pantoja, con 16 años en la institución. Serán presentados ante un juez de control de garantías en Pasto, la capital de Nariño. Este incidente resalta una problemática significativa dentro del sistema penitenciario colombiano, donde algunos funcionarios encargados de mantener el orden están involucrados en el narcotráfico.
La operación, parte de la iniciativa Dominó lanzada por el director del Inpec, Daniel Gutiérrez, busca erradicar la delincuencia tanto entre funcionarios como internos en las cárceles del país. Las recientes detenciones reflejan el enfoque riguroso de la nueva administración del Inpec para combatir la corrupción dentro del sistema penitenciario. La crisis en la entidad no solo se manifiesta en casos de corrupción, sino también en problemas de hacinamiento y condiciones inhumanas en numerosos centros.
