Trump sacó a EE.UU. de la Unesco y anuncia retiro de otras organizaciones mundiales

Estados Unidos confirmó su salida de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en un movimiento que refleja la política de “Estados Unidos Primero” del presidente Donald Trump.

Diplomáticos europeos aseguraron que esta decisión entrará en vigor a fines de 2025. Se trata del segundo retiro ordenado por Trump, tras uno similar durante su primer mandato.

El anuncio oficial llegó por medio de una portavoz de la Casa Blanca, Anna Kelly. Kelly sostuvo que la Unesco apoya “causas culturales y sociales progresistas y divisivas” que “contradicen las políticas de sentido común” aprobadas por los ciudadanos en noviembre de 2024.

Según el Departamento de Estado, la permanencia en la Unesco “no responde al interés nacional” y la agencia persigue “una agenda ideológica globalista” incompatible con la estrategia exterior estadounidense.

El retiro forma parte de una revisión global de la participación de EE. UU. en organismos de la ONU.

Trump ya ordenó la salida de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y suspendió aportes a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Este examen concluirá en agosto de 2025 con un informe final que evaluará el valor estratégico y financiero de cada dependencia.

La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, lamentó la resolución pero calificó la decisión de “esperada”.

Azoulay recordó que la agencia diversificó sus fuentes de financiación y que EE. UU. aportaba apenas el 8 % de su presupuesto anual.

La funcionaria aseguró que la Unesco mantendrá sus programas educativos, de preservación del patrimonio y de promoción de la libertad de prensa sin contratiempos.

Israel respaldó la retirada estadounidense. Este país celebró que Washington abandonara un organismo que admitió a Palestina como estado miembro en 2011, paso que, según el Departamento de Estado, alentó “retórica antiisraelí”.

Funcionarios de la Unesco replicaron que todas las decisiones del comité de admisión fueron producto de consensos negociados con representantes de Israel y Palestina desde 2014.

Fuentes diplomáticas en París indicaron que la salida de EE. UU. no pilló por sorpresa a la secretaría general. Embajadores de diversos países previeron el movimiento político al ver el retorno de Trump a la presidencia en enero de 2025 y su histórico rechazo a organismos multilaterales.

La Unesco nació en 1945 con el propósito de promover la paz a través de la cooperación internacional.

Estados Unidos participó desde su fundación, se retiró en 1984 por objeciones sobre gestión financiera y sesgo político, y regresó en 2003 tras reformas impulsadas por George W. Bush.

Bajo la administración de Joe Biden, la nación volvió a la Unesco en 2021 junto con la OMS y el Acuerdo de París sobre cambio climático.

La agencia universitaria tiene su sede en París y sobresale por la designación de Patrimonios de la Humanidad.

Entre sus sitios destacados figuran el Gran Cañón de EE. UU., la ciudad antigua de Palmira en Siria y el Camino de Santiago en España. Los beneficios de la membresía incluyen acceso a proyectos de conservación, redes académicas y fondos para iniciativas educativas en países en desarrollo.

Con la confirmación del retiro, la Unesco perderá el segundo mayor miembro tras la OMS en términos de influencia política.

Expertos en relaciones internacionales advierten que la decisión erosionará la capacidad de EE. UU. para incidir en agendas culturales globales y dejará espacio a potencias que promueven enfoques alternativos de cooperación.