Resumen
Los documentos judiciales revelaron la dependencia del actor Matthew Perry a la ketamina antes de su muerte. Fue encontrado inconsciente por su asistente tras inyectarle dosis de ketamina. Cinco personas están acusadas de distribución ilegal de la droga a Perry, incluyendo dos médicos.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Los recientes documentos judiciales revelan detalles perturbadores sobre los últimos días de Matthew Perry, la estrella de “Friends”. El actor, quien falleció a los 54 años el 28 de octubre, se encontraba en un estado de creciente dependencia de la ketamina, un potente anestésico. Los informes detallan cómo el actor pidió dosis cada vez mayores de la droga en sus últimos momentos, reflejando un cuadro alarmante de adicción y desesperación.
En la mañana del día de su muerte, su asistente personal, Kenneth Iwamasa, le administró la primera inyección de ketamina alrededor de las 8:30. Más tarde, mientras Perry veía una película en su casa de Los Ángeles, recibió una segunda dosis. Aproximadamente 40 minutos después, Perry solicitó una dosis adicional, pidiendo a Iwamasa: “Inyéctame uno grande” y le pidió que preparara el jacuzzi.
Tras administrar la tercera dosis, Iwamasa salió a hacer algunos recados. A su regreso, encontró a Perry inconsciente en el jacuzzi, ya sin vida. Iwamasa es uno de los cinco individuos acusados por las autoridades de California en relación con la distribución ilegal de ketamina a Perry. Los cargos incluyen conspiración para distribuir la droga, y los acusados también incluyen a dos médicos y una mujer que presuntamente actuó como distribuidora.
La ketamina, conocida por sus propiedades anestésicas y psicodélicas, es a veces utilizada para tratar la depresión y la ansiedad en contextos médicos, pero también se usa de forma recreativa. Los documentos judiciales muestran que Perry había estado luchando contra la adicción y había buscado cada vez más ketamina a medida que se le negaba una mayor dosis en una clínica local.
El informe de la autopsia reveló que Perry falleció por “efectos agudos” de la ketamina, con niveles en su sangre equivalentes a los utilizados para la anestesia general. Los documentos indican que Perry había pagado al menos 55,000 dólares por ketamina a lo largo de un mes antes de su muerte.
El Dr. Salvador Plasencia y el Dr. Mark Chávez, implicados en el caso, se encuentran bajo acusación. Plasencia, conocido como “Dr. P.” y Chávez, fueron acusados de suministrar ketamina mediante recetas fraudulentas. Los textos entre Plasencia y Chávez muestran una preocupación más por el lucro que por el bienestar del actor.
El fiscal del Distrito Central de California, Martin Estrada, condenó a los acusados por explotar los problemas de adicción de Perry. “Sabían que lo que hacían era peligroso para el Sr. Perry, pero lo hicieron de todos modos, buscando beneficiarse a costa de su sufrimiento”, afirmó Estrada en una rueda de prensa.
