Resumen
El presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, ha nombrado a cuatro mujeres académicamente calificadas pero con poca experiencia política en los puestos de Justicia, Agricultura, Transporte y Educación. Este cambio abrupto en su gabinete ha causado sorpresa y dudas.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La metamorfosis del presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, que cambia de opinión como cambiarse de ropa, acaba de registrar un cambio abrupto al nombrar como ministras de Justicia, Agricultura, Transporte y Educación, a cuatro mujeres con títulos académicos respetables pero con muy poca experiencia en el ejercicio del poder, porque tendrán la responsabilidad de manejar la administración de justicia, el desarrollo agropecuario del país, la construcción de carreteras, aeródromos y autopistas, así como el manejo de la educación en todos los niveles.
El nombramiento de María Constanza García (nortesantandereana) como ministra del Transporte en remplazo de William Camargo, egresado de la Escuela de Posgrado de la Universidad Pontificia Bolivariana, seccional Santander, no estaba en el radar de la opinión pública, en tratándose de uno de los mas destacados miembros del gabinete ejecutivo, que además estaba reactivando la construcción de los ferrocarriles nacionales desde la Costa Pacífica hasta la región Caribe, que tienen estudios de factibilidad muy avanzados.
La designación de la abogada Ángela María Buitrago, que hizo parte de la terna de aspirantes a la Fiscalía General de la Nación, es el producto de unos acercamientos con el partido de los Comunes y con los desmovilizados de las guerrillas de las FARC, uno de cuyos familiares ha sido miembro de la organización terrorista que aceptó los acuerdos de paz con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, bajo el seudónimo de ‘Andrés París’, que fue relacionista de la organización alzada en armas. Aunque los títulos académicos justifican la existencia de méritos para la administración de justicia, el nombramiento siembra dudas sobre los verdaderos anhelos del gobierno nacional.
La escogencia de la abogada Martha Carvajalino para remplazar a la santandereana Jennifer Mojica como ministra de agricultura, tiene como finalidad la compra de grandes extensiones de tierras para impulsar la ‘Reforma Agraria Integral’, simplemente porque ha trabajado en la Procuraduría General de la Nación en temas ambientales, pero no tiene experiencia en temas agropecuarios, que aplicarían a los programas de fomento en los niveles de producción de alimentos para cubrir las necesidades de millones de colombianos. El departamento de Santander se quedó sin representación en el gabinete ministerial, porque así lo dispuso el Presidente Petro, que poco ama este departamento.
La sorpresa del nombramiento de Juan Fernando Cristo Bustos, de reconocida matrícula liberal debe interpretarse como la convocatoria de un veterano líder de esa colectividad, en el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, que mantiene muy buenas relaciones con las diferentes bancadas políticas que tienen representación en el Congreso de la República. Los santandereanos tenemos una gran confianza en la tarea que se ha propuesto el nuevo ministro del Interior, que ha sido secretario general de la presidencia de la república y dos veces ministro de la cartera de la política. Su padre fue asesinado por las guerrillas del autodenominado Ejército de Liberación Nacional, que se han mostrado reticentes a los acuerdos de paz en nueve ocasiones y frente a nueve procesos de reconciliación política que se han ensayado en Colombia.
