Resumen
La directiva de Instrucción Pública de Santander exige a los colegios privados la nivelación de sueldos para docentes en las mismas condiciones que en instituciones públicas. Según el Párroco José Antonio Díaz Gómez, esto podría provocar el cierre de al menos 50 colegios religiosos en Santander.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Si bien la educación es un derecho fundamental consagrado con la Constitución Nacional de 1991 y en las leyes de la república, los colegios privados – y especialmente de comunidades religiosas --, son empresas privadas al servicio de la educación, que deben definir de las rentas que producen las pensiones de los estudiantes el costo de la nómina para el personal docente.
Un reciente concepto de la dirección de instrucción pública del departamento de Santander exigió a la junta directiva del Colegio Sagrado Corazón, que funciona en Zapatoca, la nivelación de sueldos para el profesorado en las mismas condiciones en que se reconocen y pagan las nóminas oficiales del magisterio. Con este criterio, numerosos colegios de comunidades religiosas están en quiebra y a punto de cerrarse, porque el producido de las pensiones que pagan los padres de familia no es suficiente para atender los requerimientos económicos de la educación pública.
El Párroco de Zapatoca, sacerdote José Antonio Díaz Gómez considera que, de aplicarse la nivelación de sueldos para los educadores de colegios oficiales con los colegios privados, por lo menos deberían cerrarse cincuenta colegios de comunidades religiosas en el departamento de Santander.
Una comisión de padres de familia del colegio Sagrado Corazón espera reunirse con el gobernador de Santander y la directora d4e educación del departamento, antes de tomar una determinación que conduciría al cierre de los emblemáticos colegios de las Hermanas Betlemitas, de las Hermanas de la Presentación y de los sacerdotes de la Comunidad de la Sagrada Familia, que desde el año pasado se declararon en bancarrota.