Resumen
Un individuo robó los péndulos de dos campanas de un templo católico en San Gil. A pesar de su bajo valor económico, son fundamentales para las ceremonias. Tras la denuncia, la Policía recuperó los elementos vendidos en una chatarrería y detuvo a una persona.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Un individuo ingresó en horas de la madrugada a un templo católico en San Gil y se llevó los péndulos de dos campanas. El hurto ocurrió a las 3:50 de la madrugada del viernes 5 de abril en la iglesia Pablo Sexto de la Parroquia San Juan de Dios.
El sacerdote Fabián Anibal López, vicario parroquial, explicó que el ladrón aprovechó que el lugar estaba solo para robar los péndulos, que son elaborados con cobre. Aunque el valor económico de los péndulos es relativamente bajo, alrededor de 10 mil pesos, son piezas fundamentales para la parroquia, ya que se utilizan para avisar a los fieles sobre el inicio de las celebraciones litúrgicas.
La iglesia, construida en 2002, estima que las campanas tienen unos 25 años de antigüedad. Tras realizar denuncias por redes sociales, la Policía de San Gil inició investigaciones y logró recuperar los elementos, que ya habían sido vendidos en una chatarrería.
La coronel Jennifer Moreno, comandante del Primer Distrito de la Policía de Santander, entregó los péndulos al vicario parroquial de la iglesia Pablo Sexto. Una persona fue judicializada por el delito de receptación, al tener en su poder los péndulos robados.
Los elementos serán reinstalados en las campanas para que los seguidores del catolicismo puedan escuchar su sonido antes de las eucaristías y otras celebraciones en el templo.