Resumen
Un intenso El Niño está causando graves sequías en Colombia, afectando la producción energética y suministro de agua. La EAAB ha suspendido servicio en algunos sectores de Bogotá y adoptado medidas de racionamiento. Expertos critican la falta de medidas preventivas.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Desde julio de 2023, un evento de El Niño de intensidad significativa azota Colombia, generando estragos en el recurso hídrico y la producción energética del país lo que ha obligado, en algunas ciudades, a medidas de racionamiento de agua potable para enfrentar la crítica sequía.
La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) anunció suspensiones alternadas del servicio en diferentes sectores de la ciudad, con el objetivo de ahorrar dos metros cúbicos por segundo de agua y garantizar el suministro mínimo vital durante la crisis.
Esta medida drástica se toma ante los preocupantemente bajos niveles de los embalses, especialmente el sistema Chingaza, que se encuentran en un crítico 16% de su capacidad.
La experta en oceanografía Andrea Devis Morales, Ph.D. y profesora de la Universidad del Rosario, lamenta que "a pesar de las lecciones aprendidas en pasados eventos de El Niño, donde se han vivido intensas sequías, reducción de caudales de ríos e incendios forestales, no se ha tomado medidas preventivas para mitigar el impacto de este fenómeno".
Devis Morales critica la falta de acciones oportunas y la tardía reacción ante la crisis: "Ya en enero se registraba una reducción del consumo de agua en Bogotá de 18 m3/s a 17 m3/s, pero estas medidas fueron insuficientes y tardías, considerando los bajos niveles del sistema Chingaza".
La profesora resalta la importancia de la educación y la conciencia ciudadana para enfrentar la crisis: "El 22 de marzo se celebró el Día Mundial del Agua, una oportunidad para crear conciencia sobre el cuidado de este recurso, pero no se aprovechó. Se requieren campañas intensivas que informen a la comunidad sobre la gravedad de la situación".
Las medidas de racionamiento podrían generar alarma en la población, ocasionando un almacenamiento innecesario de agua que agravaría la situación. Devis Morales sugiere iniciar con racionamientos por horas y campañas de sensibilización desde el comienzo del descenso en los niveles de los embalses, en las ciudades que sea necesario, en todo el país.
