Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Cuando se posesionó hace dos años el actual presidente de la república Gustavo Petro y prohibió la actividad exploratoria para la industria petrolera, proponiéndole al mundo la reducción de los combustibles de origen fósil, quedamos atónitos y perplejos de la propuesta gubernamental que cerraba la producción de los campos petroleros de El Platero en Puerto Wilches y del Campo Coyote, en jurisdicción de San Vicente de Chucurí.
‘Este hombre está loco’ repitieron algunos trabajadores petroleros afiliados a la ‘Unión Sindical Obrera de Barrancabermeja’, a los cuales los invitaron a formar parte de la junta directiva de la Empresa Colombiana de Petróleos, para pagarles su silencio. En los primeros meses persiguieron a los antiguos ejecutivos de planta industrial que operaban la Refinería de Barrancabermeja, algunos de los cuales llevaban muchos años de experiencia y fueron retirados de sus cargos.
Emisarios del partido comunista y algunos otros afines a la subversión y el terrorismo, adelantaron campaña proselitista para elegir a Gustavo Petro, que proclamaba el final de la era de los combustibles de origen fósil, para iniciar el tránsito hacia la producción de ‘energías limpias’. Ecopetrol dejó de producir en los últimos dos años el cuarenta y dos por ciento (42%) de las utilidades, que venía liquidando cada año y el propio presidente de la república se opuso a continuar explotando, vía fracking, unos campos petroleros en los Estados Unidos, donde ECOPETROL operaba hasta hace poco tiempo unos campos petroleros a mar abierto en Bahía de México.
En materia de seguridad, el gobierno del presidente Petro anunció hace dos años una política de paz total para una veintena de grupos armados ilegales y movimientos terroristas, financiados por las bandas criminales del narcotráfico, que convirtieron a los departamentos del Cauca, Nariño, Caquetá y Putumayo en la zona cocalera más grande del mundo. Con los pueblos indígenas crearon unas milicias que ejercen autoridad territorial, desplazando a las fuerzas militares y de policía, cuyos comandantes fueron llamados a calificar servicios.
Crearon el ‘Ministerio de la Igualdad’, para asignarle funciones a la vicepresidenta de la República y entregarle el manejo de una burocracia inútil, al servicio de las negritudes. Con ella, se crearon nuevas embajadas de Colombia en los países del Continente Africano. En la nueva ley sobre reforma del sistema pensional en Colombia, le asignaron subsidios a tres millones de personas mayores, que devoran a dentelladas el presupuesto nacional, sin haber realizado los aportes para los organismos de seguridad social. ¡El sartal de locuras y equivocaciones es impresionante!
El paro camionero, que ha bloqueado las principales carreteras del país y que ha colocado contra la pared al gobierno del Presidente Gustavo Petro, está teniendo unas consecuencias desastrosas para Colombia. Los camioneros tienen que pagar costosas tarifas en las estaciones de peaje y altos precios de los combustibles, que se han multiplicado para financiar las obras de mantenimiento de las carreteras troncales, la mayoría de ellas en gravísima situación de abandono.
