Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Este miércoles, cientos de usuarios de la Nueva EPS en Santander se movilizaron en un plantón frente a la droguería de Cafam, en la carrera 35 de Bucaramanga, para protestar por una serie de fallas en la prestación de servicios de salud. Entre las denuncias más recurrentes están la entrega incompleta de medicamentos, la falta de especialistas, demoras en la asignación de citas médicas y problemas financieros que afectan el funcionamiento de la EPS.
Virgilio Ramírez, vocero de los usuarios en el departamento, explicó que uno de los principales problemas es la entrega parcial de medicamentos esenciales, incluidos aquellos para tratar enfermedades crónicas como hipertensión, problemas cardíacos y cáncer. “De una fórmula de cuatro medicamentos, entregan solo uno, y los otros quedan pendientes”, señaló Ramírez.
La situación se ha agravado tras la destitución en noviembre pasado del Superintendente de Salud y la consecuente rotación de interventores en las EPS intervenidas, según denunciaron los usuarios. “En vez de mejorar, empeoró. Cambiaron todos los interventores que se habían nombrado para resolver el tema”, agregó el vocero.
La demora en la asignación de citas médicas también es crítica, especialmente para consultas con especialistas, las cuales pueden tardar entre 4 y 5 meses en ser programadas. Esto afecta gravemente a los pacientes que necesitan atención urgente, exacerbando su situación de salud.
Además, la Nueva EPS enfrenta una crisis financiera significativa, siendo una de las entidades con mayores deudas a hospitales en todo el país. Aunque en 2024 se prometió un giro de 2.5 billones de pesos por parte del gobierno para cubrir parte de las deudas, los usuarios aseguran que los pagos no se han realizado, lo que perpetúa la crisis en el sistema de salud.
Esta problemática afecta a cerca de 2 millones de usuarios en las regiones de Santander, Norte de Santander y el sur del Cesar, quienes continúan enfrentando serias dificultades para acceder a una atención médica adecuada. Los manifestantes exigen soluciones inmediatas y una intervención efectiva que garantice el derecho a la salud.
