Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)No quisiéramos ver tanta ignominia y tanto peligro en las calles de Bucaramanga, con centenares de drogadictos tirados en los parques, consumiendo productos sicotrópicos y revisando en las canastas de las basuras los pedazos de comida, mientras en su alrededor pululan carteristas y bandidos que atalayan a los ciudadanos para despojarlos de los teléfonos celulares, de los bolsos del mercado y de las carteras, mientras en los barrios periféricos se forman cuadrillas de atracadores, que tienen azotada a la capital del departamento.
El alcalde Juan Carlos Cárdenas Rey, patrocinado por la ‘Liga de Profesionales Anticorrupción’, que creara el controvertido y locuaz ingeniero Rodolfo Hernández Suárez, le quedó mal a sus patrocinadores y entrega una ciudad abandonada y triste, donde resulta imposible disfrutar de los espacios verdes, porque están en ruinas, provocadas por quien había recibido la confianza de miles de electores, que cuatro años después de su gestión, lamentan sus propias equivocaciones políticas.
Las parrandas a puerta cerrada, que halagaron al burgomaestre, todavía se registran y se comparten en redes sociales, comparadas con la costosa contratación de orquestas que vinieron a los eventos feriales, mientras los artistas criollos se quedaban viendo un chispero, porque la limosna del presupuesto oficial no les alcanzaba para satisfacer sus vocaciones artísticas. La luna de miel en el reparto del presupuesto de las obras públicas mediante la figura de la ‘Urgencia Manifiesta’ le pasará factura en estrados judiciales, donde habrá terminado el jolgorio, para iniciar el camino del viacrucis.
El ingeniero Rodolfo Hernández Suárez, patrocinador de la candidatura de Juan Carlos Cárdenas Rey a la alcaldía de Bucaramanga, ha guardado silencio como si nada hubiera pasado, mientras desde las trincheras de los periódicos locales se analizan los resultados de la pecaminosa improvisación en manos de personas inexpertas e impreparadas para dirigir los destinos de Bucaramanga. Las opiniones del ex alcalde y ex gobernador Alberto Montoya Puyana se convierten en comidilla diaria de las élites sociales, que analizan el estado de postración de la capital de Santander, convertida en una pesebrera donde los animales domésticos y los pordioseros depositas sus miasmas, sin que haya autoridad alguna que se atreva a imponer una orden de comparendo, para castigar a los puercos que han convertido los parques y las calles en asquerosas letrinas.
Las sanciones por desacato a providencias judiciales, para trasladar el botadero de basuras de ‘El Carrasco’, que debería ejecutarse hace dos años, llegaron tarde, cuando ya estaban disfrutando de vacaciones los magistrados y jueces de la república. En el olvido fue quedando el proceso judicial de ‘Vitalogic’, adelantado en varios escenarios, en los juzgados penales de Bucaramanga y en la sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, donde se cubrió con el manto de la vergüenza el escándalo de la pretendida compra de una planta procesadora de basuras, que comportaba el pago de una ‘prima de éxito’. El nuevo alcalde Jaime Andrés Beltrán ha encontrado más de trescientos casos de contratos sin el cumplimiento de requisitos legales. ¡Esperemos a ver como comienza el viacrucis!