Resumen
Luz Adriana Camargo Garzón ha sido elegida como la Fiscal General en Colombia para el periodo 2024-2028. Con una carrera de 35 años en la justicia, y habiendo investigado casos de corrupción, su elección se basa en su vasta experiencia y enfoque para combatir la impunidad.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En medio de la incertidumbre por las dificultades en la elección de la Fiscal General de la Nación, los veintitrés magistrados de la Corte Suprema de Justicia concurrieron a la cita para una nueva votación, en la cual resultó triunfante la brillante jurista Luz Adriana Camargo Garzón. La otrora magistrada auxiliar de la Corte Suprema de Justicia e integrante de la Comisión Internacional contra la Impunidad en la república de Guatemala tomará las riendas del ente investigador para el período 2024-2028. Su trayectoria, de más de 35 años en la rama judicial, incluso vinculada a la Fiscalía, acreditan su experiencia profesional y escogió a la exmagistrada Camargo Garzón, luego de escuchar su propuesta para combatir la impunidad en Colombia.
Desde el año de 1987, Camargo Garzón comenzó actividades en la rama judicial como oficial mayor del Juzgado 19 Superior en Bogotá, proyectando fallos por delitos relacionados con homicidios y contra la fe pública, casos que fueron reconocidos como actos de corrupción. Durante 27 años escaló por diferentes cargos hasta llegar, en 2005, a la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia, en la que hizo parte de la recién creada Unidad Especial de Investigación, que recibió la misión de indagar por los nexos y alianzas políticas que habían firmado varios políticos con los grupos paramilitares.
La designación de Camargo en el cargo de Fiscal General de la Nación tuvo como base la experiencia que tenía tras su paso como fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, entre 2003 y 2004, donde dirigió investigaciones muy delicadas contra ministros, gobernadores, parlamentarios y miembros de misiones diplomáticas por hechos relacionados con la corrupción por la celebración irregular de contratos. Como magistrada auxiliar, cargo en el que estuvo hasta el 13 de enero de 2014, proyectó decisiones en investigaciones y juicios por los delitos de cohecho (entrega de sobornos), concusión, peculado, enriquecimiento ilícito, lavado de activos, contratación pública ilegal, tráfico de influencias, prevaricato, delitos electorales, injuria, calumnia, delitos contra la vida e integridad personal.
Los veintitrés magistrados de la corte Suprema de Justicia aportaron dieciocho votos a la elección de la nueva Fiscal General de la Nación, que horas después aceptó el cargo y anunció cinco estrategias para tratar de resolver los gravísimos problemas de impunidad que existen en Colombia, donde hasta los hijos de los presidentes de la república terminan delinquiendo, como ha pasado con Nicolás Petro, que se encuentra llamado a juicio por el blanqueo de donaciones de dudosa procedencia para la financiación de la campaña presidencial. En estas investigaciones se conocerá el temple y el carácter de la nueva funcionaria que se convertirá en la cabeza principal de la rama judicial en Colombia.
