Resumen
Carlos Estiven Martínez Barrera fue condenado a 41 años y 21 días de prisión por el feminicidio agravado de Yuli Henao López en Cimitarra, Santander, reflejando la gravedad del crimen y la necesidad de abordar la violencia de género en Colombia.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El caso del feminicidio de Yuli Henao López conmocionó a la comunidad de Cimitarra, Santander, y derivó en una condena ejemplar de 41 años y 21 días de prisión para Carlos Estiven Martínez Barrera, quien fue declarado culpable de feminicidio agravado.
El fallo del Juzgado 1 Penal de Cimitarra refleja la gravedad del crimen y la necesidad de sentar precedentes para enfrentar la violencia de género.
Yuli Henao, docente de 48 años, fue asesinada el pasado 25 de junio en su hogar tras un ataque motivado por los celos enfermizos de Martínez Barrera, quien era su pareja.
Según el relato judicial, el conflicto se desató después de que Yuli no respondiera 35 llamadas, lo que llevó a una discusión que escaló a la violencia. En un intento por proteger a sus hijos de las amenazas del agresor, Yuli se interpuso, recibiendo heridas mortales con arma blanca. Sus hijos, aunque resultaron lesionados al intentar defenderla, no lograron salvarla.
El juez destacó el historial de violencia del acusado, quien ya había agredido a otras mujeres anteriormente. Este patrón de comportamiento, sumado a la brutalidad del acto, fundamentó la sentencia. La Fiscalía presentó pruebas contundentes, incluyendo videos captados por vecinos, que mostraron la magnitud del ataque.
La comunidad educativa y los allegados de Yuli lamentaron profundamente su pérdida. Como docente, se destacaba por su vocación y compromiso con la formación de niños en zonas rurales.
Este trágico caso pone en evidencia la urgencia de reforzar medidas de prevención y atención a la violencia de género en Colombia, así como de fomentar cambios sociales que eliminen las dinámicas posesivas y agresivas en las relaciones de pareja.
