A cuchillo mataron a párroco en Norte de Santander
El sacerdote Ramón Montejo, de 45 años, fue asesinado en un parqueadero en el barrio Jesús Cautivo de Ocaña, Norte de Santander, el mediodía del 4 de junio. Dos hombres armados con cuchillos lo atacaron cuando iba a sacar su camioneta para dirigirse al corregimiento de Buenavista, donde servía como sacerdote.
El ataque ocurrió cuando Ramón Montejo estaba a punto de subirse a su vehículo. Los agresores lo atacaron por la espalda, provocándole múltiples heridas. Durante el forcejeo, el sacerdote cayó al suelo y, en su huida, los delincuentes se subieron a la camioneta, atropellando al reverendo, quien falleció en el lugar.
La comunidad alertó a la Policía, que implementó un plan candado. La camioneta fue encontrada en el barrio San Fermín, a tres kilómetros del parqueadero. En ese lugar, las autoridades capturaron a uno de los presuntos asesinos.
La Diócesis de Ocaña lamentó la muerte del sacerdote, destacando su dedicación y devoción a la iglesia, así como su participación en gestiones humanitarias para liberar a personas secuestradas en la región del Catatumbo.