Resumen
El presidente Gustavo Petro destaca la relación entre el cambio climático y problemas sociales en Colombia, citando la crisis de agua en Bogotá, la quema de la selva amazónica y la destrucción de ríos por minería ilegal. Urge soluciones inmediatas para detener la crisis climática.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
“Algo está pasando en el planeta para que Bogotá se queda sin agua, para que la selva amazónica se queme, y para que los ríos del Pacífico se destruyan”, consideró el mandatario.
Una nueva lectura del cambio climático que afecta al mundo entero y, en especial, a Colombia tiene que ver con la relación estrecha entre la degradación del medio ambiente y los problemas sociales y políticos del país, planteó el presidente Gustavo Petro.
Durante el acto de apertura de la Zona Verde de la COP16, que sesiona en Cali desde hoy y hasta el próximo primero de noviembre, el mandatario dijo que esa relación se ve reflejada en tres casos puntuales del escenario colombiano: la crisis de agua en Bogotá, la quema de la selva amazónica, la sequía del río Amazonas, y la afectación de todos los ríos del Pacífico colombiano por cuenta de la minería ilegal.
“No hemos ligado los conflictos sociales y políticos de Colombia a la inmensa desigualdad del tercer país más desigual del mundo, con el hecho de la crisis climática. Entre más desigualdad más se afecta la crisis climática. Al mismo tiempo que somos el tercer país más poderoso del planeta en biodiversidad, somos también el tercer país más desigual socialmente del mundo, con unas consecuencias inmediatas de la crisis del clima en nuestra propia sociedad”, explicó el jefe de Estado.
Sobre la crisis de agua en Bogotá, aseguró que hay que revitalizar la selva amazónica en millones de hectáreas. “Tenemos que llevar de nuevo los árboles, quizás a través de los afrentes del río Amazonas hasta la Cordillera Oriental, para volver a ver los ríos voladores llegar a los páramos de esa Cordillera y lograr que ese embalse (Chingaza), del que 70% de los bogotanos toma agua potable, pueda llenarse”, consideró.
El segundo caso que expuso es la quema de la selva amazónica y la desaparición por evaporación, debido al calor, del río Amazonas. “Vemos las fotos increíbles pasando de una frontera a otra, caminando, cuando antes era imposible o solo lo podían hacer nadadores profesionales como nuestro viejo amigo Capax, que ya no puede nadar en el río Amazonas porque está seco; y la selva amazónica en más de 100.000 puntos empezó a quemarse, no por la acción humana, sino por el calor y la temperatura”, sostuvo.
El tercer aspecto que mencionó es la afectación de la minería ilegal a todos los ríos del Pacífico colombiano, “de la mano de unos codiciosos que, con retroexcavadoras y sin importar ni el agua, ni el pez, ni el niño que se queda sin el agua, ni la población que se queda sin el agua, destruyen la base de la vida solo para sacar unos kilos de oro y venderlo clandestinamente y con esos kilos de oro comprarse tres fusiles y dispararle al prójimo”.
El jefe de Estado añadió que se trata solo de tres aspectos que, analizados en profundidad, pueden llegar a la misma conclusión: “algo está pasando en el planeta para que Bogotá se queda sin agua, para que la selva amazónica se queme, y para que los ríos del Pacífico se destruyan”.
Por ello, dijo que es necesario actuar de inmediato: “Detrás de cada problema hay un problema general que aboca a la humanidad a detener esa crisis climática que tiene una raíz económica dentro de los seres humanos”, puntualizó
