Resumen
Veintidós estudiantes de la Universidad Industrial de Santander han recibido la beca Alfonso Marín Morales de la constructora Marval, en reconocimiento a su desempeño académico y situación económica. Esta beca ayuda a estudiantes de bajos recursos a continuar sus estudios.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Veintidós estudiantes de la Universidad Industrial de Santander (UIS) han sido beneficiarios de la beca Alfonso Marín Morales, otorgada por la constructora Marval, en reconocimiento a su positivo desempeño académico y su situación económica.
Este auspicio, destinado a jóvenes de escasos recursos con un buen promedio académico, refleja el compromiso y la dedicación de los beneficiarios, como es el caso de Mayra Alejandra Benítez González, estudiante de cuarto semestre de Ingeniería Mecánica en la sede UIS Socorro.
Originaria de San Vicente de Chucurí, Mayra Alejandra ha mantenido una firme determinación por ayudar a su familia y alcanzar su título profesional en Ingeniería Mecánica. “Vengo del campo y me considero una persona todo terreno. Esta carrera me gusta, la elegí en especial por la parte del diseño, esa es mi pasión. Este programa es muy bueno y me gustaría que más mujeres se animaran a cursarlo”, destacó Benítez González.
Estudiantes UIS becarios Marval
La perseverancia y dedicación de Mayra Alejandra se han traducido en un positivo rendimiento académico, el cual le ha permitido la obtención de esta beca, que la ayuda a sortear las dificultades económicas que enfrenta. “Esta beca me ayuda mucho para el semestre, para comprar alimentos, elementos de uso personal y poder sacar las fotocopias”, señaló Benítez González
Juan Carlos Carrizalez Leguizamo, estudiante de quinto semestre de Ingeniería Química, también ha sido beneficiario. Originario de Arauca, se ha visto obligado a alejarse de su hogar para perseguir su sueño de convertirse en profesional. Para él, esta beca ha sido fundamental para su sostenimiento y el de su hijo.
“Con mucha disciplina he podido mantener esta beca, vivo muy agradecido, ya que he podido suplir parte de mis gastos acá en Bucaramanga y los de mi pequeño Alejandro”, subrayó Carrizalez Leguizamo.
No cabe duda que este apoyo económico es un salvavidas para estos estudiantes. No obstante, acarrea responsabilidades que pueden llegar a generar presión, la cual deben aprender a manejar. “Siempre hay un poco de miedo por mi situación de llegar a perder la beca, me haría mucha falta. No obstante, me concentro y pienso en mi hijo, esto me ayuda a no desfallecer, a tratar de esforzarme al máximo para seguir cosechando buenas calificaciones”, añadió Carrizalez Leguizamo.
El equipo de Bienestar Estudiantil entabló una reunión con estos becarios para honrarlos por este logro, conocerlos más a fondo y recalcarles que la dependencia está abierta para brindarles todo el apoyo necesario para que mantengan este beneficio sin que se vea afectada su salud mental.
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