Resumen
Una mujer de 57 años murió inesperadamente durante un tratamiento para venas várices en un centro estético de Colombia. A pesar de ser una técnica segura, la escleroterapia puede presentar efectos adversos. Las autoridades instan a verificar acreditaciones y posibles riesgos.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En un trágico suceso, una mujer de 57 años murió inesperadamente durante una sesión de escleroterapia, un tratamiento para las venas várices, en un centro estético del barrio Laureles. A pesar de que su primera sesión transcurrió sin contratiempos, la segunda resultó fatal cuando la paciente se descompensó y se desvaneció, a pesar de los esfuerzos de reanimación por parte del personal del centro.
El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Sijin se hizo cargo del levantamiento del cadáver de la víctima, originaria del municipio de La Unión. Hasta el momento, las causas del deceso son desconocidas, un hecho que sorprende dado que la escleroterapia es considerada una técnica segura con mínimos riesgos asociados.
La técnica de la escleroespuma, empleada en este caso, consiste en inyectar una solución esclerosante en la vena afectada para su posterior fibrosis, mejorando así el flujo sanguíneo hacia venas sanas.
A pesar de su reputación de seguridad, es importante tener en cuenta que la escleroterapia no está exenta de efectos adversos, incluidos coágulos de sangre y burbujas de aire que pueden causar mareos y desmayos. Este incidente se suma a otro evento fatal ocurrido en Medellín, donde una mujer falleció tras someterse a una cirugía estética, destacando así una preocupante tendencia.
Las autoridades hacen un llamamiento a la ciudadanía para que verifiquen la acreditación de los centros estéticos, así como las credenciales de los profesionales y su capacidad para responder a emergencias, y que se informen detalladamente sobre los posibles riesgos según su estado de salud.
