Resumen
La movilidad en Colombia se ve afectada por la congestión en las terminales de transporte de Bogotá y Medellín, con esperas de hasta ocho horas para obtener un pasaje. La demanda ha superado la capacidad de las terminales y transportadoras.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El cierre del año en Colombia se ha visto marcado por una crisis en la movilidad, especialmente en las terminales de transporte de Bogotá y Medellín. Miles de personas se aglomeran en las taquillas y se congestionan los sistemas de despacho de flotas intermunicipales y buses interdepartamentales.
En Bogotá, tanto la Terminal del Norte como la de Salitre experimentan demoras significativas en la entrega de pasajes y en la salida de buses hacia los municipios cercanos. Se han reportado esperas de hasta ocho horas solo para recibir el tiquete del pasaje. La situación se complica debido a la necesidad de viajar a diferentes partes del país y a los altos costos de los tiquetes aéreos.
La gerente de la Terminal de Transportes de Bogotá, Ana María Zambrano, anticipa que el sábado 30 de diciembre será el día con la mayor movilización de pasajeros desde la capital hacia municipios cercanos. Se espera que más de 130,000 pasajeros se movilicen durante este puente festivo.
En Medellín, la Terminal del Norte también colapsó con la llegada de más de 320,000 personas en busca de tiquetes para viajar al Urabá antioqueño y a la costa Caribe. La congestión vehicular en algunas salidas de la ciudad complica aún más la gestión de las empresas transportadoras.
A pesar de los esfuerzos logísticos, la demanda ha superado la capacidad de las terminales y las empresas transportadoras. Algunas personas critican la falta de una planificación adecuada en los planes de contingencia por parte de las autoridades de movilidad tanto a nivel local como nacional.
