Resumen
El feminicidio de la profesora Yuli Henao, asesinada por su pareja en Barrancabermeja, ha causado conmoción en la comunidad. El agresor, presuntamente ebrio, también hirió gravemente a uno de los hijos de Yuli. La comunidad exige justicia y clasificación del caso como feminicidio.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El trágico feminicidio de Yuli Henao, una profesora de la Institución Educativa El Cerrito, ha causado una gran conmoción en la comunidad. Los hechos ocurrieron durante la mañana del martes 25 de junio en una vivienda del barrio Diamante, donde la víctima fue atacada por su compañero sentimental, identificado como Carlos Estiven Martínez Barrera.
Según la información proporcionada por la Alcaldía de Barrancabermeja, el agresor llegó a la casa de Yuli Henao presuntamente bajo los efectos del alcohol y la atacó con un cuchillo. Durante el violento ataque, uno de los hijos de Yuli intentó defenderla y resultó gravemente herido.
Elda Henao, hermana de la víctima, relató la terrible experiencia: “El niño menor también salió ileso, está en cirugía porque él metió las manos para salvar a su mamá y el hombre le dañó los tendones. Lo remitieron para Bucaramanga a cirugía. Y también la hija de 30 años está herida. Ha sido algo muy terrible. Ellos trataron de salvar a su mamá y no pudieron. No pudieron salvar a su mamá”.
La comunidad de Cimitarra ha reaccionado con indignación y tristeza ante este atroz crimen. Familiares y amigos de Yuli Henao han organizado una velatón en su memoria, exigiendo justicia y que las autoridades clasifiquen este hecho como feminicidio para asegurar que el responsable reciba una condena ejemplar.
Este caso se suma a una preocupante tendencia de violencia de género en Santander. Cabe recordar que el pasado enero, se registró otro feminicidio en La India, corregimiento de Landázuri, cerca de Cimitarra. En lo que va del año, ya se han reportado 13 casos de feminicidio en el departamento.
Los familiares de Yuli Henao esperan que las autoridades actúen con firmeza para tipificar este crimen como feminicidio y aplicar la máxima pena al agresor. La comunidad sigue en duelo, recordando a Yuli como una educadora dedicada y una madre amorosa, cuya vida fue truncada por un acto de violencia incomprensible.
Este lamentable evento resalta la urgencia de fortalecer las medidas de protección y apoyo a las víctimas de violencia de género, así como la necesidad de una justicia rápida y contundente para los perpetradores de estos crímenes atroces.