Resumen
Iván Márquez, líder de la guerrilla Nueva Marquetalia, quedó apartado tras la división del grupo debido a desacuerdos sobre la paz. Sus excompañeros, ahora en la Coordinadora Guerrillera del Pacífico, buscan la paz sin él. La facción disidente aumenta su poder delictivo en Colombia.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El líder guerrillero de las FARC, Luciano Marín Arango, nacido en Florencia (Caquetá), donde logró estudiar en un colegio religioso, conocido con el seudónimo de Iván Márquez, quedó rezagado del resto de la guerrilla de la denominada ‘Nueva Marquetalia’, por haberse dividido esa organización terrorista, entre partidarios de los diálogos de paz, que están conversando con voceros del gobierno nacional y un sector minoritario que prefiere quedarse en zona montañosa del oriente del país con el negocio del narcotráfico. Las diferencias que tenían las unidades que conformaban la denominada Segunda Marquetalia llevaron a que ese grupo criminal se fragmentará por lo que Iván Márquez quedará únicamente a su lado con alias el ‘Zarco Aldinever’ y operando únicamente en el departamento de Vichada.
En un comunicado, los desertores de la Nueva Marquetalia aseguran que no comparten la postura que Márquez tuvo en una carta que se presentó por lo que deciden partir cobijas. “La paz y los cambios democráticos y la reconciliación de los pueblos, no puede girar alrededor de una persona o personas. La paz no es propiedad privada o exclusiva de unos; la paz es de las comunidades”, dicen quienes abandonaron la Marquetalia y se unieron a la Coordinadora Guerrillera del Pacífico que está compuesta por los Comandos de Frontera y el ejército Bolivariano.
Esto quiere decir que surge una nueva disidencia en Colombia con un gran poder criminal y en dicho comunicado informan que no continuarán en la Segunda Marquetalia. “La decisión unánime y autónoma de quienes hoy suscribimos este comunicado, es continuar el tránsito por el camino hacia la paz con dignidad social para todos; atendiendo el clamor y los anhelos de la población”.
Alias ‘Iván Márquez’ fue negociador de los acuerdos de paz de las guerrillas de las FARC en La Habana (Cuba) durante el gobierno de Juan Manuel Santos Calderón y prefirió quedarse en la zona fronteriza con Venezuela, donde fue objeto de un atentado a bala por grupos paramilitares en la cual perdieron a varios de sus unidades. De regreso al monte, se dedicaron a explotar las rutas del narcotráfico y la minería ilegal. Tuvo la oportunidad de reintegrarse a la vida civil, pero la ambición por el poder de las armas y del dinero lo sepultó en la manigua y ahora lo han dejado abandonado sus propios compañeros de armas.
