Resumen
Las madres comunitarias en Colombia enfrentan incertidumbre laboral y pagos atrasados a pesar de compromisos del Icbf. La falta de contratos estables, especialmente el bono pensional prometido, ha llevado a la convocatoria de un paro nacional para exigir mejores garantías laborales.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Las madres comunitarias de Colombia han expresado su creciente inconformidad por la demora en sus pagos y la falta de estabilidad en sus contratos con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf). A pesar de los compromisos acordados en febrero de 2023, las trabajadoras continúan enfrentando incertidumbre respecto a su situación laboral, especialmente en relación con el bono pensional prometido por el gobierno de Gustavo Petro.
La directora de Primera Infancia del Icbf, María Mónica Martínez, anunció que se espera regularizar los pagos a partir de junio de 2024. Sin embargo, muchas madres comunitarias han firmado contratos de solo dos o tres meses desde junio, lo que ha llevado a la convocatoria de un paro nacional por parte de uno de los sindicatos del Icbf para exigir mejores garantías laborales.
Una madre comunitaria de Bucaramanga, quien pidió mantener su nombre en reserva, manifestó que los pagos han sido irregulares, afectando a quienes están cerca de la jubilación. Otra madre de Antioquia destacó la dificultad de organizarse para el paro, pues muchas sienten miedo de perder sus contratos al dejar de atender a los niños.
La directora del Icbf, Astrid Cáceres, aseguró que hay desinformación entre las madres sobre su relación laboral con la entidad. A pesar de esto, la presidenta del sindicato Sintracihobi, Olinda García, reiteró que la falta de contratos estables sigue siendo un problema crítico, afectando las prestaciones sociales y la estabilidad laboral de las madres comunitarias en todo el país.
