Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Un incidente de seguridad tuvo lugar el 26 de noviembre cuando una mujer, de entre 55 y 60 años, logró abordar un vuelo de Delta Airlines sin boleto en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy (JFK) en Nueva York, con destino a París. La pasajera, portadora de un pasaporte ruso y residente permanente en EE. UU., fue descubierta solo después del aterrizaje en el Aeropuerto Charles de Gaulle, lo que generó alarma sobre los protocolos de seguridad. A pesar de haber pasado por el control de seguridad sin ser detectada como una amenaza, logró eludir al menos dos puntos de verificación de identidad antes de abordar.
Durante el vuelo, la mujer se ocultó en los baños del avión, donde permaneció durante largos periodos, lo que despertó la curiosidad de los pasajeros. Al llegar a París, el capitán informó a los pasajeros sobre el 'grave problema de seguridad' y les pidió permanecer sentados mientras las autoridades francesas manejaban la situación. La mujer fue retirada de la aeronave y está actualmente detenida en la zona ZAPI del Aeropuerto Charles de Gaulle, a la espera de su deportación a Estados Unidos.
Delta Airlines, en un comunicado, expresó su compromiso con la seguridad y dijo que está llevando a cabo una investigación junto con las autoridades de aviación y seguridad. La TSA también está revisando los procedimientos de seguridad en el JFK, uno de los aeropuertos más transitados del mundo, especialmente en un periodo de alta demanda como el del feriado de Acción de Gracias.
Este incidente ha levantado serias preocupaciones sobre las brechas en los protocolos de seguridad, con expertos calificando el suceso como 'inconcebible'. La TSA está bajo presión para identificar cómo la mujer pudo evadir múltiples puntos de control, un fallo que, según algunos, pone en evidencia una grave debilidad en la cadena de seguridad.