Presidente Gustavo Petro critica la salida de Sura EPS del sistema de salud colombiano

En un giro inesperado, Sura EPS, una de las mayores proveedoras de servicios de salud en Colombia, ha anunciado su decisión de hacerse a un lado en medio de una crisis que ha venido creciendo durante varios años. Esta noticia ha provocado una respuesta directa del presidente Gustavo Petro, quien, a través de su cuenta de redes sociales, expresó su inquietud y culpó al Senado de la República por la situación.

Petro subrayó la importancia de enmiendas recientes que fueron rechazadas por el Senado, apuntando a que su desaprobación ha sido un factor importante en la acumulación de problemas para entidades de salud como Sura EPS, que se considera la segunda mayor en cantidad de afiliados después de Compensar, la cual también indicó que dejará de operar poco a poco. "Las empresas prestadoras de salud ahora operan como aseguradoras, confrontando duras exigencias incluyendo la necesaria garantía de reservas técnicas, que también requerirían de recursos públicos," escribió el mandatario.

En contraste, Ana María Vesga de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi) apuntó al gobierno como responsable de las adversidades que encaran los principales proveedores del servicio. "EPS como Sura, Sanitas y Compensar alertaron sobre su profunda crisis, con una subida desmesurada en los índices de siniestralidad y pérdidas consistentes," comunicó Vesga, citando también desafíos como la insólita deuda con los prestadores y falta de capital.

Petro sin embargo mantuvo su postura de culpar al legislativo, enfatizando que la cancelación de la reforma al sistema de salud hace más de un año produjo un efecto dominó desastroso que ahora amenaza la cobertura de salud de más de 5.5 millones de colombianos.

Además, el presidente comentó sobre el proceso de retiro de Sura, criticando el modelo actual por no proteger los intereses públicos y apuntó a la influyente familia Vargas Lleras, responsabilizándola de considerables déficits financieros en diversas organizaciones de salud.

Sura EPS, que atiende a 5.547.000 pacientes, de los cuales 4.6 millones son del régimen contributivo, alega haber probado todas las posibilidades antes de tomar la determinación de retirarse. "Hemos interactuado con otros actores del sistema en busca de soluciones, pero nos quedamos sin tiempo y deben tomarse decisiones para frenar un mayor detrimento," afirmó Juana Francisca Llano, directora de Suramericana.

Entretanto, la Superintendencia de Salud tiene 65 días hábiles para responder a la solicitud de Sura EPS, que actualmente asume una situación de pérdidas continuas. Mientras tanto, Sura permanecerá operativa, acogiendo cualquier otra solución que ofrezca la entidad reguladora.