Resumen
Gustavo García debutó como ministro del Interior enfrentando críticas por retrasos administrativos y falta de liderazgo en la defensa de la reforma a la salud. La discusión avanzó con solo siete artículos aprobados, poniendo en duda su capacidad para liderar esta agenda crítica.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El debut de Gustavo García como nuevo ministro del Interior encargado no pudo ser más complicado. Su primera prueba fue la defensa de la reforma a la salud en la plenaria de la Cámara de Representantes, y los resultados no fueron alentadores. Retrasos administrativos, reclamos de la oposición y la sensación de falta de liderazgo marcaron su inició en un cargo clave para el Gobierno.
El primer tropiezo llegó con la publicación tardía del decreto de su nombramiento, lo que retrasó el inicio de las sesiones extraordinarias. Luego, varios congresistas de la oposición lo señalaron por la falta de garantías en el debate y cuestionaron la fecha de su nombramiento, que no coincidía con la publicación en el Diario Oficial.
A pesar de las dificultades, la discusión de la reforma avanzó, aunque solo se lograron aprobar siete artículos antes de que las sesiones extraordinarias llegaran a su fin. Ahora, la suerte del proyecto se definirá en las sesiones ordinarias a partir del 17 de febrero.
Mientras tanto, en los pasillos del Congreso, las voces críticas no tardaron en aparecer. "Le falta liderazgo y experiencia", comentaron algunos legisladores, asegurando que con este arranque el Gobierno Petro se queda sin un verdadero defensor de su agenda legislativa.
La gran pregunta que nos ronda a todos los colombianos es: ¿podrá García revertir esta mala impresión y consolidarse en el cargo, o su paso por el Ministerio será efímero?