Resumen
Ante la inminente temporada de lluvias, las autoridades de Bucaramanga, Colombia, han declarado una calamidad pública. Esta medida busca prevenir y responder de manera oportuna a emergencias, especialmente en zonas de alto riesgo. También permitirá el acceso a recursos adicionales.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Municipio se alista ante la inminente ola invernal
La capital santandereana, al igual que otras regiones del país, es susceptible a los efectos de la temporada invernal, por eso la declaratoria de calamidad pública busca minimizar los riesgos para la población.
En una reunión extraordinaria realizada este viernes 3 de mayo en la Alcaldía de Bucaramanga, las autoridades locales, en conjunto con organismos de socorro, bomberos y la Unidad de Gestión del Riesgo, declararon la calamidad pública en la ciudad ante la inminente llegada de la temporada de lluvias.
Esta medida, tomada con antelación, busca prevenir y atender de manera oportuna cualquier emergencia que pueda afectar a las comunidades, especialmente a aquellas que residen en zonas de alto riesgo y las que han sido focos de desastres en anteriores años.
“Ha sido declarada la calamidad pública en Bucaramanga ante la temporada de lluvias que se avecina. Junto a entidades y Gestión de Riesgo, hacemos esta declaratoria para prevenir cualquier hecho que pueda afectar a las personas que viven en zonas de alto riesgo. Nos preparamos”, escribió el Alcalde Jaime Beltrán en su cuenta de X, quien además enfatizó en la importancia de la colaboración ciudadana para mitigar los impactos de la temporada invernal que se avecina.
Recursos adicionales
Las fuertes lluvias que se han registrado en las últimas semanas en la región han generado emergencias como inundaciones, deslizamientos, damnificados, evacuaciones y bloqueos de vías, lo que ha motivado a las autoridades a tomar medidas preventivas para proteger a la población.
La declaratoria de calamidad pública permitirá a la Alcaldía de Bucaramanga acceder a recursos adicionales para atender las emergencias que se puedan presentar, así como realizar obras de mitigación del riesgo en las zonas más vulnerables.
Históricamente la temporada de lluvias, en Colombia, se presenta entre abril y noviembre, por lo que es importante estar preparados para afrontar sus posibles efectos. La colaboración entre las autoridades y la ciudadanía es fundamental para minimizar los riesgos y proteger la vida y el bienestar de todos.