Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En una contundente operación militar conjunta con la Fiscalía General de la Nación, el Ejército Nacional asestó un duro golpe a las organizaciones criminales dedicadas al hurto de crudo en el municipio de Tibú, Norte de Santander.
Las tropas, en desarrollo de operaciones de inteligencia y vigilancia, lograron la ubicación y destrucción de dos refinerías ilegales, tres piscinas artesanales y dos válvulas ilícitas conectadas al oleoducto Caño Limón-Coveñas.
La primera acción se llevó a cabo en la vereda Campo Seis, donde se encontraron dos refinerías ilegales y dos piscinas artesanales con capacidad para almacenar y procesar más de 15.000 galones de crudo hurtado. En estos sitios, el petróleo era convertido en combustible artesanal conocido como "pategrillo", utilizado en la producción de cocaína.
En una segunda operación, los militares ubicaron dos válvulas ilícitas conectadas a la línea de transferencia de la Estación Norte y una piscina artesanal adicional, donde se almacenaban más de 20.000 galones de hidrocarburo hurtado.
Tras asegurar la zona, se dispuso la reparación e inhabilitación de las instalaciones por parte de personal especializado de la empresa privada responsable del oleoducto. El daño ambiental causado por estas actividades ilícitas es considerable y podría tardar cientos de años en ser reparado.
El Ejército Nacional reafirma su compromiso con la protección del medio ambiente y la lucha contra las actividades ilegales que afectan los recursos naturales del país. Estas operaciones demuestran la contundencia de las acciones contra las organizaciones criminales que se lucran con el hurto de crudo, generando graves daños ambientales y poniendo en riesgo la seguridad de las comunidades.
Las autoridades hacen un llamado a la comunidad a denunciar cualquier actividad ilícita relacionada con el hurto de crudo o la presencia de estructuras criminales en la región.