Bucaramanga Área Metropolitana es sexta en el Índice de Competitividad

Hubo ascenso en los indicadores para 26 entes territoriales

La posición de Bucaramanga en el ICC 2024 es un reflejo de su esfuerzo por avanzar en competitividad, aunque no exento de retos. La comunidad, las instituciones y las autoridades deben asegurar que la ciudad continúe su trayectoria positiva.

El Consejo Privado de Competitividad (CPC) y la Universidad del Rosario han presentado recientemente su informe del Índice de Competitividad de Ciudades, ICC, para el año 2024, en el que Bucaramanga Área Metropolitana ha logrado posicionarse en el sexto lugar entre las 32 capitales y áreas metropolitanas evaluadas.

Con un puntaje de 6,1 sobre 10, Bucaramanga supera a ciudades como Pereira y Barranquilla, que ocupan las posiciones séptima y octava, respectivamente. Este resultado refleja un esfuerzo continuo por mejorar la competitividad en el contexto regional y nacional.

Uno de los aspectos destacados en esta edición del ICC es la implementación de cambios metodológicos significativos. Entre estos, se encuentra un ajuste en el método de estandarización que considera los valores máximos y mínimos históricos de las variables analizadas durante un período de seis años.

Este enfoque permite no solo la comparación entre ciudades, sino también un análisis más profundo de la evolución del desempeño competitivo a lo largo del tiempo.

El informe revela un avance generalizado en el desempeño competitivo de las ciudades evaluadas. De los 32 entes territoriales analizados, 26 presentaron un incremento en su puntuación en comparación con los resultados de 2019.

Esta tendencia sugiere un panorama alentador para el desarrollo de las ciudades capitales en Colombia, así como un progreso notable en el cierre de las brechas regionales.

Las ciudades que experimentaron los avances más significativos en sus puntajes fueron Inírida, Yopal y Armenia, con incrementos promedio anuales de 2,7 %, 2,1 % y 1,9 %, respectivamente.

Sin embargo, no todo son buenas noticias; Leticia se destacó negativamente al registrar la mayor reducción en su puntaje general, con una caída promedio anual de 1,9 %.

La comparación entre las ciudades más y menos competitivas —Bogotá y Mitú— también revela un incremento en la brecha de puntajes, que pasó de 4,6 en 2019 a 4,9 en 2024.

Fortalezas y Desafíos de Bucaramanga

Bucaramanga, con su puntaje de 6,1, se ha consolidado como un referente en educación básica y media, donde logró la calificación más alta, con 7,7 sobre 10, posicionándose en el sexto lugar a nivel nacional.

En este pilar, la ciudad se destaca especialmente en las pruebas Saber 11, donde ocupa la segunda posición a nivel general como en colegios oficiales. Este desempeño resalta el compromiso de Bucaramanga con la educación, un factor crucial para la competitividad a largo plazo.

No obstante, el área metropolitana enfrenta serios desafíos, particularmente en el pilar de sostenibilidad ambiental, donde obtuvo su puntaje más bajo, con 3,9 sobre 10.

Este resultado es preocupante, dado que Bucaramanga ocupa la última posición a nivel nacional en el indicador de vida útil del sitio de disposición final de residuos. La gestión ambiental se ha convertido en un tema crítico y la ciudad capital deberá implementar estrategias efectivas para abordar esta situación.

Respecto a 2023, Bucaramanga mantiene su posición en el sexto puesto. Sin embargo, el informe señala que en cuatro de los 13 pilares evaluados se han registrado avances significativos, se destaca el aumento de 0,5 puntos en el pilar de educación superior y formación para el trabajo.

Reconocimientos y perspectivas futuras

En contraposición, la ciudad experimentó una disminución de 1,2 puntos en el pilar de sofisticación y diversificación, un fenómeno atribuible al retroceso en el indicador de diversificación de la canasta exportadora.

Andrés García-Suaza, decano de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, enfatizó el esfuerzo de ciudades como Bucaramanga por mejorar su competitividad en áreas clave.

Asimismo, Ana Fernanda Maiguashca, presidenta del CPC, resaltó la importancia del ICC 2024 como una herramienta para enriquecer el debate sobre competitividad desde un enfoque subnacional.

Según Maiguashca, “creemos que este informe es un insumo crucial para la coyuntura actual, que contribuirá al análisis de los grandes temas del país”.

A medida que Bucaramanga avanza en su camino hacia la competitividad, es fundamental que se continúen implementando políticas públicas efectivas y se fomente la colaboración entre el sector privado, la academia y los gobiernos locales.

La educación y la sostenibilidad ambiental emergen como dos pilares clave que determinarán el futuro competitivo de la ciudad. Con un compromiso renovado y un enfoque en la innovación, Bucaramanga puede no sólo mantener su posición, sino también aspirar a escalones aún más altos en el Índice de Competitividad de Ciudades en los años venideros y crecer en el país.