Resumen
Jordy Andrés Pinzón Celis, un mototaxista de 31 años, fue asesinado en Bucaramanga tras negarse a dar un cigarrillo a hombres armados, quienes dispararon indiscriminadamente. El alcalde de Lebrija llamó a reforzar la vigilancia en zonas propensas a actividades ilícitas.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Jordy Andrés Pinzón Celis, un mototaxista de 31 años, fue asesinado en la madrugada del 1 de diciembre en un mirador de la vía hacia el aeropuerto Palonegro, área metropolitana de Bucaramanga. Según reportes preliminares, el hecho ocurrió tras una disputa con hombres armados que le exigieron un cigarrillo y, tras su negativa, abrieron fuego indiscriminadamente, hiriendo también a otras dos personas que permanecen en estado crítico.
La víctima, junto con un grupo de amigos que incluía cuatro hombres y dos mujeres, había salido de la discoteca Hawaii, ubicada en la vía a Barrancabermeja, y se dirigió al mirador para continuar consumiendo bebidas alcohólicas. En el lugar, fueron abordados por dos hombres que exigieron dinero y elementos para preparar sustancias ilícitas. Al ser rechazados, los agresores dispararon contra el grupo.
Pinzón Celis falleció en el hospital de Lebrija, donde llegó sin signos vitales, mientras que los heridos, identificados como José Camilo Vega Duarte y Jaime Alberto Duarte Barón, fueron trasladados a la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Santander.
Las investigaciones revelaron antecedentes judiciales en los involucrados. Pinzón Celis tenía anotaciones por violencia intrafamiliar, mientras que los otros dos heridos estaban vinculados a delitos como receptación y homicidio. De hecho, Duarte Barón estaba siendo investigado por hechos ocurridos en el mismo lugar en 2023, cuando una riña culminó con un homicidio.
El alcalde de Lebrija, Gabriel Martínez Calderón, señaló que el área es propensa a actividades ilícitas, como venta de drogas, e hizo un llamado a reforzar la vigilancia en el marco del "Plan Navidad" para evitar hechos similares durante la temporada decembrina. Además, recordó que la zona está bajo medidas restrictivas, como la prohibición de pólvora no certificada y un horario limitado para actividades nocturnas.
Este caso, que suma a las cifras de violencia en el área, ha despertado la preocupación de las autoridades locales, quienes buscan intervenir en puntos críticos para garantizar la seguridad durante las festividades de fin de año.
