Alta demanda y colapso en urgencias del HUS
Resumen
El Hospital Universitario de Santander enfrenta una saturación total especialmente en urgencias y cuidados neonatales, lo que ha obligado a priorizar pacientes y restringir ingresos. Se busca optimizar la red alterna para evitar la sobreocupación.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El Hospital Universitario de Santander (HUS), principal centro asistencial del nororiente colombiano, vive una crítica situación por la alta ocupación de sus servicios médicos, especialmente en las unidades de urgencias para adultos y en las áreas de cuidado intensivo, intermedio y básico neonatal, donde se reportó un 100% de ocupación. Esta saturación obligó a la institución a restringir el ingreso de gestantes cuyos recién nacidos puedan requerir atención especializada inmediata.
José Orlando Quintero Correa, subgerente médico del hospital, advirtió que la situación, sostenida durante varios días, ha derivado en la necesidad de priorizar el ingreso de pacientes según su gravedad. “Tenemos una ocupación total en las unidades de cuidado neonatal, lo cual nos obliga a restringir el ingreso de gestantes con embarazos de alto riesgo”, explicó el funcionario.
El hospital hizo un llamado urgente al Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (CRUE), a la red pública departamental, a la Policía Nacional y a las entidades responsables del traslado de pacientes, para que direccionen los casos de menor complejidad a instituciones de mediana y baja complejidad del área metropolitana de Bucaramanga. “Es necesario optimizar el uso de la red alterna para que no se saturen más nuestros servicios y se garantice el acceso a quienes realmente lo requieren”, agregó Quintero.
Causas de la alta demanda
Uno de los factores que ha incrementado la presión sobre el HUS ha sido el aumento de adultos mayores remitidos desde otras clínicas, debido a restricciones impuestas a usuarios de la Nueva EPS en instituciones privadas como el Hospital Internacional de Colombia, la Clínica Comuneros y la Cardiovascular. Esta situación ha contribuido al desbordamiento de las 116 camillas disponibles en urgencias para adultos.
Además, el hospital ha reportado un incremento constante de ingresos de habitantes en condición de calle, trasladados por la Policía Metropolitana con lesiones menores. “Son casos que podrían ser atendidos en hospitales de menor complejidad. Su llegada agrava la sobreocupación”, añadió el directivo.
Ante este panorama, las autoridades del HUS insistieron en que el hospital debe reservar su capacidad instalada para pacientes que requieren intervenciones de alta complejidad. Así mismo, reiteraron el llamado a la ciudadanía para hacer un uso responsable del servicio de urgencias y acudir a él únicamente en situaciones que lo ameriten.
