Barrancabermeja sufre su año más violento con un asesinato cada 39 horas
Resumen
Barrancabermeja sufre una escalada de violencia sin precedentes, registrando un homicidio cada 39 horas en 2025. La mayoría de los casos están ligados al microtráfico y afectan principalmente a jóvenes. A pesar de múltiples capturas, la inseguridad persiste.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Violencia desbordada y trabajo de las autoridades en entredicho
No hay contundencia en las investigaciones para individualizar a los asesinos. El microtráfico de estupefacientes y el dominio de zonas se maneja como hipótesis central de esa escalada violenta.
El año 2025 registra una tasa de homicidios sin precedentes en Barrancabermeja: un crimen fatal cada 39 horas. Las cifras oficiales indican 71 muertes violentas en los primeros 120 días del año, el nivel más alto de los últimos veinte años en el Puerto Petrolero.
La ola de violencia golpea principalmente a los jóvenes: 38 víctimas tenían entre 14 y 28 años, de ellas, ocho eran menores de edad.
Las comunas 1, 3, 5 y 7 concentran la mayoría de los crímenes. En estos sectores el sonido de los disparos irrumpe a cualquier hora. El repunte más reciente ocurrió entre el 20 y el 30 de abril: nueve homicidios, dos de las víctimas con edades de 15 y 17 años, y dos mujeres asesinadas.
El caso más sonado fue el de la docente y líder social Genny Paola Serrano, de 26 años, impactada por 12 disparos en la comuna 5.
Bandas a sangre y fuego
El coronel Mauricio Arley Herrera Luengas presentó un balance de las investigaciones. Informó que los móviles del 91 % de los asesinatos están ligados al accionar de sicarios al servicio de organizaciones criminales: colaboradores, expendedores, familiares o parejas de cabecillas.
Delitos como el de falsedad marcaria lleva, hasta la fecha, a dos capturas recientes relacionadas con el crimen de la profesora Serrano. Ambos detenidos enfrentan cargos por posesión de armas y su posible vinculación directa con el homicidio.
Herrera Luengas detalló la complejidad del escenario. Desde 2022 tres bandas protagonizan una confrontación a sangre y fuego por el control del microtráfico en el Puerto Petrolero y municipios vecinos.
El aumento del pie de fuerza y las 1.200 capturas en el último año no revirtieron la tendencia al alza de la criminalidad. “Los jóvenes siguen vinculándose a estas bandas porque encuentran allí un falso sentido de pertenencia”, afirmó el coronel.
Cifras escalofriantes de asesinados a bala
Los guarismos recabados en lo que va de 2025, el conteo de víctimas desglosa: 63 hombres —cinco menores de edad—, seis mujeres —tres adolescentes— y dos personas sin identificar. Los barrios más vulnerables concentran zonas residenciales y centros comerciales, lo que expone a transeúntes inocentes.
Vecinos, en todas las comunas y zonas rurales, denuncian temor constante ante el asedio violento. “No podemos caminar tranquilos ni comprar alimentos sin cruzarnos con un tiroteo”, asegura doña Marta Rodríguez, residente de la comuna 3.
La ausencia del Alcalde de Barrancabermeja, quien no asistió al Consejo de Seguridad Departamental celebrado el 29 de abril, avivó la indignación ciudadana. Autoridades departamentales y líderes comunitarios exigieron su presencia para coordinar acciones conjuntas con la Policía y el Ejército. La administración local alegó conflictos de agenda, pero el silencio oficial profundiza la desconfianza.
Organizaciones sociales reclaman programas de prevención que ofrezcan oportunidades a niños y adolescentes.
Medidas categóricas para frenar la violencia
El coronel Herrera subrayó que se necesitan planes de educación y oferta de empleo. Sin embargo, líderes barranqueños exigen resultados inmediatos: “No basta con promesas. La gente necesita respuestas tangibles”, declaró el dirigente juvenil Juan Camilo Gómez.
La pregunta que circula en cada esquina, en cada casa y en cada red social es simple y contundente: ¿Quién está a cargo de la seguridad en Barrancabermeja? Mientras la respuesta oficial se demora, el número de muertos crece y el reloj del miedo avanza sin tregua.
Barrancabermeja enfrenta su prueba más dolorosa. El reto es doble: contener la escalada criminal y reconstruir la confianza entre autoridades y ciudadanos.
La convocatoria al Alcalde y al Gobierno departamental es clara: diseñar estrategias efectivas y presenciales, acompañadas de programas sociales y educativos que ofrezcan rutas de escape a los jóvenes.
Sin gestos, sin excusas, sin engaños. Solo medidas precisas para detener esa escalada de violencia.
