Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha revelado nuevos testimonios que detallan la colaboración entre miembros de las Fuerzas Armadas y paramilitares durante la “toma paramilitar de Barrancabermeja”. Estos relatos, presentados en el marco del macrocaso 08, narran cómo las fuerzas del Estado y los grupos armados ilegales trabajaron juntos en acciones que resultaron en masacres y desapariciones forzadas en esta región del Magdalena Medio.
Durante una audiencia de cuatro días, más de 50 víctimas escucharon los testimonios de exmilitares y exparamilitares implicados. Entre ellos, Jhon Alexander Vásquez, alias ‘Pepo’, ex miembro de las Autodefensas Campesinas de Santander, confesó haber coordinado la incursión paramilitar en Barrancabermeja en 1999. Según su relato, los paramilitares recibieron apoyo de militares del Batallón de Contraguerrilla No. 45, lo que resultó en la masacre de ocho personas y la desaparición de dos más.
Vásquez también reveló que, por órdenes del subjefe de seguridad de Ecopetrol, grabó de manera ilegal las asambleas sindicales de la USO, lo que permitió a los paramilitares identificar a los líderes sindicales como objetivos militares. Entre las víctimas de esta persecución se encontraba Rafael Jaimes Torra, quien fue asesinado poco después de que se le incluyera en la lista.
Otro testimonio clave fue el del mayor retirado Oswaldo Prada, exjefe de inteligencia del Batallón de Artillería Nueva Granada. Prada detalló cómo el batallón facilitó la entrada de los paramilitares a Barrancabermeja durante la masacre del 16 de mayo de 1998, en la que fueron desaparecidas 25 personas y asesinadas 7. Estos testimonios forman parte del subcaso Magdalena Medio, que ha permitido a la JEP avanzar en la identificación de responsabilidades por estos crímenes.
