Resumen
Era y sigue siendo el asunto de mayor interés para todos los ciudadanos que han padecido los rigores del conflicto armado y que quieren una mano fuerte en el gobierno seccional.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Tantas veces repetido el video que colocaron en las redes sociales con la invitación a votar en las elecciones del pasado 29 de octubre por las banderas de la ‘SEGURIDAD’ en los diferentes municipios del departamento de Santander, le dieron la victoria al Mayor General (r) Juvenal Díaz Mateus, que solamente prometió garantizarles la tranquilidad a los habitantes de este departamento.
Era y sigue siendo el asunto de mayor interés para todos los ciudadanos que han padecido los rigores del conflicto armado y que quieren una mano fuerte en el gobierno seccional para poner en calzas prietas a los grupos de bandidos que el gobierno del Presidente Gustavo Petro ha venido premiando con procesos de paz, que han sido fuente de la peor impunidad en estos años de barbarie.
La promesa del Mayor General ® Díaz Mateus se hizo creíble en todos los rincones del departamento, donde todo lo demás parecía sobrar en los discursos de los aspirantes a los cargos de elección popular, muy a nuestro pesar por el retraso que padecemos en la construcción y mejoramiento de la malla vial, que registra cuarenta años de olvido y marginalidad en esta región, donde naciera hace un siglo la industria petrolera nacional.
El segundo candidato a la gobernación de Santander, el joven abogado Héctor Guillermo Mantilla Rueda, de estirpe conservadora como el Mayor General Díaz Mateus, había tomado la iniciativa de construir un sistema de transporte masivo para los municipios de la Zona Metropolitana de Bucaramanga.
Los santandereanos hemos padecido muchas veces la violencia de grupos armados ilegales, a tal punto que en este territorio nacieron las guerrillas del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19) y del autodenominado ‘Ejército de Liberación Nacional (ELN), a tal punto que algunos de los miembros del actual gobierno del presidente Gustavo Petro son desmovilizados del M-19, como el Director Administrativo de la Presidencia de la República, Carlos Ramón González, natural de Puente Nacional, que fue congresista de la República luego de su reincorporación a la vida civil y democrática del país.
En cuanto a las guerrillas del ELN, fueron estudiantes rebeldes de la Universidad Industrial de Santander y del colegio Santander de Bucaramanga quienes crearon este movimiento subversivo que se ha extendido a todo el territorio nacional y cuyos actos de barbarie han provocado desolación y muerte en distintas regiones de Colombia. Tuvo el departamento de Santander hace treinta años varios frentes guerrilleros de las FARC, del ELN, del M-19 y hasta del Clan del Golfo, además de las dos organizaciones paramilitares, que actuaron en regiones del Magdalena Medio y del oriente antioqueño.
El gobierno del presidente Gustavo Petro, que convirtió a los jefes de grupos guerrilleros en trance de desmovilización, en ‘Gestores de Paz’, ha creado un panorama de terror en toda la nación y es la razón por la cual muchos oficiales de la reserva activa del Ejército, la Policía, la Armada Nacional y la Fuerza Aérea (FAC) han querido participar en política, como aspirantes a las gobernaciones y las alcaldías, a sabiendas que llegó la hora de ponerle talanquera a la subversión y el terrorismo.
La credibilidad que ha inspirado el programa de gobierno del Mayor General ® Juvenal Díaz Mateus, en materia de ‘SEGURIDAD’, le dio la victoria en las urnas y lo consagró mandatario de los santandereanos.¡Quedan cuatro años para comprobar que esa política de seguridad ciudadana se haya hecho efectiva en esta zona del país!
