Resumen
Una mujer transgénero, Blanquicet Valencia, denuncia abuso sexual y negligencia en una prisión de Medellín, Colombia. Mientras el Inpec insiste en que se respetaron sus derechos, Valencia plantea dudas sobre la efectividad del sistema judicial colombiano.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El Inpec enfrenta serias interrogantes tras la divulgación de un testimonio de abuso sexual sufrido por una mujer transgénero en una prisión de Medellín, generando un profundo malestar en la opinión pública y entre las autoridades carcelarias colombianas.
La revista SEMANA compartió el conmovedor relato de Blanquicet Valencia, quien sufrió este ataque tras cumplir dos años de una condena de 17 años por homicidio. Su version de los hechos, siempre ha señalado que actuó en defensa propia, pero la sentencia fue determinada por sólidas pruebas de la Fiscalía.
*"Me quitaron la ropa, se montaron encima y me violaron"*, contó Valencia, describiendo el horror vivido dentro de un calabozo en la cárcel El Pedregal. Su solicitud de traslado, aceptada por razones de vulneración de derechos, no anticipaba el tormento que enfrentaría a su regreso.
La víctima también denunció negligencia por parte del Inpec, asegurando que *"Pasé todo el día con él al lado, tras el alboroto que hice en la mañana"* respecto a la falta de apoyo recibido tras el ataque. El Inpec, sin embargo, insiste en que se otorgaron todas las garantías y se respetaron los derechos de Valencia.
Durante su persistente reclamo por un cambio de celda, Valencia afirma que los funcionarios le lanzaron gas en los ojos, un hecho que la institución niega, argumentando que no se usa químicos de forma individual y que no hubo registro de su uso ese día.
Finalmente, fue trasladada al Hospital La María, quedando internada por dos días. A pesar de las sugerencias de presentar una denuncia formal contra su agresor, Valencia se abstuvo, cuestionando la efectividad del sistema de justicia colombiano.