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Construyendo futuro: El impacto del programa de reincorporación en Santander

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Resumen

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En el camino hacia la paz duradera, el proceso de reincorporación y normalización juega un papel crucial en la consolidación del acuerdo final de paz en Colombia. La Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) ha lanzado un programa con el objetivo de asegurar que este proceso no solo se lleve a cabo de manera eficiente, sino que también responda a las necesidades y diversidades de quienes fueron parte del conflicto. Este enfoque, que ha sido diseñado con las voces de los firmantes del acuerdo, se enfoca en la construcción de una paz auténtica y duradera en Santander, una región clave en este proceso.

‘’Nuestro objetivo básicamente es, primero hacer estas charlas que estamos haciendo en todo el país, pero sobre todo afianzar nuestra relación con los medios de comunicación que es muy importante y de cara a este nuevo impulso que se le está dando a la implementación del acuerdo de paz, viene nueva reglamentación para el proceso de reincorporación, ese es básicamente el tema que nos trae aquí, darles a conocer los lineamientos que vienen a los nuevos firmantes de paz. Colombia entra en un momento histórico es el primer país que empieza con índices de reincorporación de medición de la reincorporación, no se ha hecho en ningún otro país del mundo’’ dijo Marta Martínez, directora de comunicaciones del programa de reincorporación.

El programa de reincorporación integral surge como una respuesta directa a la necesidad de cumplir a cabalidad con los términos del acuerdo final de paz. Este acuerdo no es solo un documento, sino un compromiso con la justicia social y la reconciliación. En este sentido, la ARN ha desarrollado una propuesta que no solo atiende a las necesidades básicas de los reincorporados, sino que también busca integrar sus aspiraciones individuales y colectivas en la vida civil.

En la construcción de este programa, se han tenido en cuenta las voces de los firmantes del acuerdo, quienes han aportado perspectivas valiosas sobre sus necesidades específicas y las particularidades de su transición hacia la vida civil. Este enfoque participativo ha permitido la creación de una oferta interinstitucional adaptada a las realidades de los reincorporados, garantizando así que se respeten y cumplan sus derechos.

‘’En total en el grupo territorial Santander y Magdalena Medio han hecho parte del proceso de reintegración, reintegración especial justicia y paz, reincorporación y atención diferencial 3.125 personas en los diferentes departamentos de Santander, Yondó Antioquia que es un municipio que tenemos en nuestro territorio y el Sur de Bolívar, estas son cifras completamente actualizadas’’.

Avances y beneficios del programa

Hasta la fecha, el programa ha beneficiado a 211 personas en proceso de reincorporación, de las cuales 45 son mujeres y 166 hombres. Esta distribución refleja el compromiso de la ARN con la inclusión y la equidad de género, aspectos fundamentales para lograr una transición efectiva hacia la paz. La participación activa de mujeres en el proceso de reincorporación no solo contribuye a la igualdad, sino que también fortalece la estructura social y económica de las comunidades afectadas por el conflicto.

Además, se han aprobado un total de 1.120 proyectos colectivos e individuales que impactan positivamente a 133 personas, con una inversión que supera los 1.060 millones de pesos colombianos. Estos proyectos, que abarcan una variedad de iniciativas desde emprendimientos hasta actividades comunitarias, no solo promueven el desarrollo económico de los reincorporados, sino que también fomentan la cohesión social y el fortalecimiento de la ciudadanía.

‘’Tenemos 2.765 personas que han hecho parte del proceso de reintegración del cual el 14% son mujeres y el 86% hombres, 2.524 persona que entraron por la denominada ruta regular, que es la que conocemos como personas que dejaron los grupos armados de manera voluntaria y 241 personas que entraron a la ruta especial de Justicia y Paz. De este total de personas 52% han culminado su proceso de reintegración y continúan 286 personas activas’’.

El objetivo primordial del programa es garantizar el acceso y el goce efectivo de los derechos, así como el ejercicio de una ciudadanía plena y democrática. En este sentido, la ARN está trabajando para que los reincorporados puedan integrarse completamente en la sociedad, participando activamente en la vida cívica y contribuyendo al desarrollo de sus comunidades.

Este enfoque integral no solo se centra en la implementación de proyectos económicos, sino también en la promoción de valores democráticos y el fortalecimiento del tejido social. La educación, la capacitación y el acompañamiento psicosocial son componentes esenciales del programa, asegurando que los reincorporados no solo cuenten con las herramientas necesarias para el desarrollo económico, sino también para su integración social y emocional.

Desafíos y oportunidades

A pesar de los avances significativos, el proceso de reincorporación enfrenta desafíos que deben ser abordados para garantizar su éxito a largo plazo. Uno de los principales retos es la consolidación de la paz en regiones que aún enfrentan tensiones y desigualdades. La ARN, en colaboración con otras instituciones y organizaciones locales, trabaja constantemente para superar estos obstáculos y garantizar que los beneficios del programa lleguen de manera equitativa a todas las personas involucradas.

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