Resumen
Israel lanzó ataques masivos contra objetivos en el Líbano, matando a dos altos dirigentes de Hezbolá, aumentando la crisis humanitaria. Desde el inicio de la ofensiva, se registran 44 muertos y más de un millón de desplazados. El PM libanés advierte sobre el colapso inminente.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Israel ha lanzado una serie de ataques masivos contra objetivos en el Líbano, cobrándose la vida de otros dos altos dirigentes de Hezbolá, según confirmaciones del grupo. Nabil Qaouq, jefe de seguridad de la organización, y Ali Karaki, comandante del frente sur, fallecieron en los bombardeos. Estos ataques siguen al asesinato del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, ocurrido hace apenas un día, lo que ha debilitado considerablemente a la cúpula del grupo chiita.
Desde el inicio de esta ofensiva israelí, que comenzó el 28 de septiembre, al menos 44 personas han perdido la vida, y más de un millón de ciudadanos han sido desplazados, en lo que se perfila como el mayor éxodo de la historia del país. En las últimas 24 horas, el Comité de Emergencia del gobierno libanés ha contabilizado 216 ataques aéreos, que han arrasado amplias zonas de Beirut y sus alrededores, incrementando la crisis humanitaria.
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El primer ministro del Líbano, Najib Mikati, calificó la situación como “insostenible” y advirtió que el país está “al borde del colapso”. En respuesta a la catástrofe, el Programa Mundial de Alimentos ha lanzado una operación de emergencia para ayudar a un millón de personas afectadas por la escalada de violencia, aunque ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para financiar con 105 millones de dólares las operaciones de ayuda.
Mientras tanto, miles de libaneses y refugiados sirios han comenzado a huir hacia la frontera con Siria, buscando escapar de los intensos bombardeos que ya han destruido cientos de viviendas y provocado el colapso de los servicios básicos en el sur del país.
