Resumen
El parlamento cubano aprobó una ley que permite a pacientes terminales decidir no prolongar artificialmente su vida. Cuba se une a Colombia en permitir la eutanasia en América Latina. La ley también actualiza regulaciones para el trasplante de órganos y mantiene el derecho al aborto.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El viernes pasado, el parlamento cubano aprobó una nueva ley de salud que otorga a los cubanos en "fase agónica o terminal" el derecho a decidir no prolongar artificialmente su vida o recurrir a procedimientos para morir de forma "digna". Esta legislación fue aprobada por unanimidad en el pleno de la Asamblea Nacional del Poder Popular. Sin embargo, antes de entrar en vigor, el texto debe ser adoptado por el legislativo.
La normativa especifica que las personas con enfermedades crónicas degenerativas e irreversibles, que experimenten un sufrimiento intratable o que estén en una fase agónica o terminal de vida, podrán optar por "limitar el esfuerzo terapéutico, recibir cuidados paliativos o aplicar procedimientos que pongan fin a la vida". Se establece que la regulación de estos procedimientos específicos estará contenida en una ley especial propuesta por el Ministerio de Salud en el futuro, cuando las condiciones del país lo permitan.
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Leonardo Pérez Gallardo, presidente de la Sociedad Cubana de Derecho Civil y de Familia, destacó que esta legislación reconoce un derecho que había sido debatido previamente durante las discusiones sobre el Código de las Familias en 2022, que introdujo medidas como el matrimonio igualitario y el vientre subrogado.
En el contexto latinoamericano, Cuba se une a Colombia, que despenalizó la eutanasia en 1997. Mientras tanto, países como Ecuador, Uruguay y Chile están considerando proyectos relacionados, y en México ya existe una ley que permite al paciente o su familia solicitar no prolongar la vida mediante medios artificiales.
Además de las disposiciones sobre la eutanasia, la nueva ley de salud, que sustituye a la vigente desde 1983, introduce regulaciones actualizadas para el trasplante de órganos, tejidos y células. Asimismo, mantiene el derecho a la interrupción del embarazo y a las técnicas de reproducción asistida.
