Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El 13 de abril de 2022 el joven José Mauricio Ospina, quien tenía 17 años de edad y era estudiante de undécimo grado en un colegio ubicado en la localidad de Kennedy de Bogotá, fue hallado muerto, con el cuerpo desnudo, boca abajo y envuelto en una sábana, luego de departir con tres amigos.
El cadáver del menor, quien además estudiaba un curso técnico en cocina en el Sena, fue encontrado en una casa en la localidad de Patio Bonito horas después de que saliera de su residencia con la excusa de que iba a hacer tareas con un compañero del colegio.
“Él estaba haciendo tareas del Sena en el computador. Yo salí a hacer una diligencia y él se quedó en la casa, pero me dijo que iba a ir a donde un compañero del colegio a hacer unas tareas. Ese compañero a donde él iba yo lo conozco, mi hijo inclusive ya se había quedado varias veces a dormir ahí”, relató a 'Semana' Claudia Velásquez, madre de José Ospina.
Sin embargo, la mujer no volvió a saber de su hijo esa noche del 12 de abril, pues él no contestó sus llamadas. El joven tampoco se encontraba en la casa del compañero que había dicho, sino que terminó en la residencia de otro, y sin vida.
“Yo regresé a la casa a las ocho de la noche y él no estaba. Hacia las 11 de la noche lo llamé y no me contestó. Me quedé dormida y a las 4:30 a. m. me levanté con angustia porque todavía no había llegado a la casa; le empecé a marcar al celular y al tercer intento me contestaron del CTI y me aseguraron que ellos tenían el celular en su poder porque se encontraban en una casa en donde había pasado una emergencia e indicaron que los heridos fueron remitidos al hospital de Kennedy”, recordó la madre en diálogo con medios de comunicación.
En el centro médico le confirmaron a Claudia Velásquez que su hijo había muerto. "El investigador del CTI me aseguró que lo encontraron muerto y desnudo, mientras que los otros tres jóvenes estaban alterados e idos”, contó.
El informe de necropsia de Medicina Legal determinó que la causa de muerte de José Mauricio Ospina fue asfixia mecánica y presentaba contusiones en la cabeza, además de que su cuerpo fue movido varios metros.
Uno de los amigos de Ospina dijo a las autoridades que todos se encontraban jugando a la tabla ouija y una de las instrucciones fue asesinar a un compañero, siendo José Mauricio el elegido.
Otros de los jóvenes afirmó que habían consumido droga tipo LSD y también indicó que jugaron a la tabla ouija momentos antes de la muerte de José Ospina. Sin embargo, la prueba toxicológica descartó presencia de licor o droga en su organismo.
Más de un año y medio después del hecho, la familia de José Mauricio Ospina sigue pidiendo justicia, pues la muerte del menor aún no ha sido esclarecida y por lo tanto no se han determinado responsabilidades.
