Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El viernes nos encontramos con la noticia del proyecto de ley que busca el aumento del impuesto predial. El ministro Bonilla habla y defiende el polémico proyecto y el presidente, como siempre, trata de mentirosos a todos los que lo critican. Pero la realidad es que este proyecto es una chambonería para buscar recaudar dineros por el fallido intento de implementar el catastro multipropósito.
Como recuento, en términos generales, el catastro se refiere a un registro o sistema que documenta la propiedad de la tierra, la ubicación de las parcelas, la titularidad de las propiedades y la información relacionada con ella. El propósito principal de un catastro es mantener un registro de la propiedad de la tierra para fines legales, fiscales y de planificación urbana. Así mismo, "catastro multipropósito” (CM) se refiere a un sistema que combina información geoespacial y registros de propiedades para múltiples propósitos, como gestión del territorio, planificación urbana, administración de recursos naturales, entre otros. Está relacionado con el uso de tecnologías geoespaciales y bases de datos para una gestión más eficiente y versátil de la tierra y los recursos.
En ese orden, en Colombia, cuando se firmó la “paz”, uno de los compromisos era la implementación del CM. Yo, que en ese entonces trabajaba con una de las pocas empresas que realizan esto en el mundo, estábamos terminando de implementar este catastro en Timor Oriental. La empresa ya había hecho trabajos en Malasia, Indonesia, Angola, Portugal, España y Brasil. Celebramos la noticia y nos pusimos manos a la obra dispuestos a entrar en Colombia y dar la solución definitiva a los conflictos por tierra y a los ingresos que debían generarse por la implementación. La tasa de retorno que ofrecíamos era de 1 a 18. Por cada dólar invertido en CM, al país le retornarían 18 USD.
No obstante, ocurrió lo de siempre. Nos reunimos con la dirección nacional del IGAC, Catastro Medellín, Alcaldía de Pereira, Área Metropolitana de Bucaramanga y Agencia Nacional de Tierras. Nunca se avanzó en nada. Todos estaban anonadados. Evidentemente, ya tenían cómo iniciar y una ruta clara, pero a nadie le interesaba que se implementara. Fue más de un año trabajando sin que se diera ningún avance. Entonces, vino la pandemia y peor. Comienzan los corruptos a pedir, anticipadamente, algo a lo que no le jugamos, y la única cosa buena que trajo la fallida “paz de Santos”, terminó por convertirse en un cliché que hasta ahora todos siguen repitiendo sin tener idea de lo que en realidad significa el Catastro Multipropósito.
Prueba de ellos es que tienen un enorme atraso y apenas se ha llegado a un 9,4% de los predios. En el 2017 la actualización era del 5%. Es decir, en 6 años solamente han avanzado el 4,4%. Este hecho es el reflejo de problemas políticos y económicos de naturaleza estructural, en donde la situación crítica está en el área rural. Que este gobierno tan malo, mezquino y perezoso, pretenda meternos un proyecto de ley justificando un aumento del 300% antes de la implementación del CM es una infamia y un tumbe a todos los colombianos. Porque cuando venga el CM, así sea en 200 años como el metro de Bogotá, la base para la liquidación estará tan elevada que la tierra y los predios valdrán nada por el alto costo tributario. La clase media quedará arruinada y los pobres no podrán ni aspirar a tener siquiera el terreno de su tumba.
Sin embargo, confío en que algún día llegaremos a la implementación para decir que somos un país libre de conflictos. La única manera de acabar con esta guerra es que todos los que tengan o aspiren a tener un pedazo de este país, no sientan que el gobierno los acosa con tributos excesivos que nunca regresarán para beneficio del pueblo.
