Resumen
Una historia que une a dos países
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Se ha presenciado un acontecimiento trascendental que ha dejado una huella imborrable en la historia de dos naciones. Este emotivo homenaje tuvo lugar en el cementerio conmemorativo de las Naciones Unidas en Busan, Corea del Sur, donde se rindió tributo a cuatro veteranos de la guerra de Corea, todos ellos miembros distinguidos del Batallón Colombia.
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Ubicados a 320 kilómetros al sudeste de Seúl, descansan los restos de los valientes combatientes: el sargento mayor José Sergio Romero, el sargento primero José Gustavo Pascagaza León, el soldado Luis Carlos García Arcila y el soldado Jorge Sánchez Tapia. Estos héroes participaron activamente en los conflictos entre 1950 y 1953, marcando el septuagésimo aniversario de su contribución.
Las familias de los fallecidos, en cumplimiento de los deseos expresados por sus seres queridos en vida, acompañaron la decisión de que reposaran en el suelo que contribuyeron a liberar. En palabras del ministro de Asuntos de Patriotas y Veteranos, Park Min-shik, el Gobierno y el pueblo de Corea recordarán perpetuamente el amor a la humanidad y el solemne sacrificio de cada veterano colombiano.
Durante el emotivo homenaje póstumo, el embajador de Colombia en Corea, Alejandro Peláez Rodríguez, elogió el coraje militar de los homenajeados y reafirmó el compromiso de fortalecer las relaciones amistosas entre ambas naciones. Además, expresó su deseo de que los veteranos descansen en paz junto a sus compañeros de lucha en la tierra donde combatieron hace siete décadas.
Mónica Pascagaza, nieta del veterano José Gustavo Pascagaza, aprovechó el momento para agradecer en nombre de las familias y de Colombia. Destacó que este homenaje no solo reconoce a los homenajeados, sino a todos los veteranos que integraron el Batallón Colombia en Corea. Su intervención reflejó el orgullo de los colombianos por el reconocimiento de Corea del Sur a la participación voluntaria de sus militares, resaltando la huella imborrable dejada en los corazones de los hermanos coreanos.
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Este hito histórico marca la primera ocasión en que veteranos de guerra colombianos fallecidos regresan a Corea, acompañados por sus familiares, para ser sepultados en el cementerio conmemorativo de las Naciones Unidas en Busan. Este camposanto alberga a soldados de diversas naciones, consolidándose como un lugar emblemático de memoria y respeto internacional. En este contexto, los gobiernos de Corea y Colombia colaboran en la aplicación de acuerdos bilaterales para fortalecer el bienestar de los veteranos y sus familiares, así como en la búsqueda de 69 militares colombianos desaparecidos durante el conflicto, mediante la identificación genética de sus familiares. Este gesto subraya el compromiso continuo entre ambas naciones para preservar la memoria histórica y honrar el sacrificio de aquellos que lucharon por la libertad.
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