Liberan a hombre tras 20 años de cautiverio por supuesto maleficio

En María la Baja, rescatan a un hombre luego de dos décadas en cadenas

Un impactante rescate tuvo lugar en María la Baja, Bolívar, cuando las autoridades liberaron a Fredy Álvarez, de 42 años, quien pasó 20 años encadenado a una cama de cemento en una sombría habitación, bajo la orden de su propio padre.

"No salía de ese lugar y no se relacionaba con nadie", expresó Maribel Pacheco, secretaria de Salud del municipio, al describir la reclusión de Álvarez, quien fue confinado tras su involucramiento en un presunto maleficio.

El espacio donde Álvarez pasó dos décadas es descrito por los testigos como reducido, con un hoyo para sus necesidades básicas y rodeado por alambre de púa. Santander Álvarez, su padre, era encargado de su cuidado y alimentación.

Su situación salió a la luz cuando un primo de Álvarez compartió en redes sociales fotografías del desolador panorama, causando una rápida intervención de las autoridades locales.

Los padres de la víctima reconocieron ante funcionarios de la Secretaría de Salud que su hijo había sido encerrado debido a un comportamiento violento. "Nos dijeron que él tenía un maleficio que lo pone agresivo... entonces lo encerraron por el temor de que cometiera algo y ellos no tenían con qué responder", informó Pacheco.

La familia Álvarez, incluidos los hermanos de Fredy que vivían cerca, se convirtieron en los testigos silenciosos de este horror. Los detalles son espeluznantes: el cuarto carecía de luz natural.

Aunque ha sido sometido a una evaluación médica inicial, que sugirió que su estado de salud no es óptimo, Fredy permanece en el mismo lugar, en espera de atención psiquiátrica especializada.

La secretaria de Salud declaró su compromiso con el seguimiento del caso: "Nosotros estamos muy pendientes de él, de la familia, acompañándolos en todo esto... y tenemos la orden con el psiquiatra", resaltando su atención a la situación.

En un mensaje esperanzador, el padre de Fredy compartió sus sentimientos tras el rescate: "Me siento contento... que el niño va a salir sano. Se los agradezco", manifestando su alivio y gratitud hacia Dios y la comunidad.