MinDefensa de Colombia confirma 'plan pistola' por parte del Clan del Golfo. 15 agentes han sido asesinados
Resumen
El plan pistola, dirigido por el Clan del Golfo, ha resultado en la muerte de 15 agentes en varias regiones de Colombia. Estos atentados buscan afectar la moral de la Fuerza Pública y restablecer el control territorial perdido.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, confirmó la existencia de un “plan pistola” orquestado por el Clan del Golfo y otras estructuras armadas ilegales contra miembros de la Policía Nacional y las Fuerzas Militares.
La estrategia criminal, que ha dejado un saldo de 15 uniformados asesinados en distintas regiones del país, busca atentar de forma selectiva contra servidores públicos bajo la modalidad de sicariato.
Según el reporte oficial, entre el 28 de marzo y el 25 de abril, 12 policías y dos militares perdieron la vida en Antioquia, Cauca, Córdoba, Norte de Santander y Bolívar.
En Simití, sur de Bolívar, dos uniformados fallecieron oficialmente por disparos y un tercero resultó herido. Las víctimas fatales son el patrullero Edwin Agustín Feria Mercado y la patrullera Belén Karina Durán Ortiz (fot0).
El agente Imanol Javier Escorcia Torres sufrió herida en el muslo izquierdo y fue trasladado a un centro asistencial.
Los homicidios se concentraron durante y después de la Semana Santa, periodo que grupos armados han aprovechado históricamente para desestabilizar la seguridad.
El ministro Sánchez detalló que el Clan del Golfo, la disidencia de las Farc conocida como Segunda Marquetalia, el ELN y bandas emergentes han coordinado atentados simultáneos.
“El plan pistola no es exclusivo de un solo grupo. Todas las estructuras lo ejecutan. Buscan desgastar la moral de la Fuerza Pública y recuperar control territorial”, aseguró.
Atentados selectivos
En Antioquia, tres uniformados fueron abatidos el 30 de marzo: dos en Caucasia y uno en Ituango. En Bolívar, un policía murió a tiros el 2 de abril mientras patrullaba el corregimiento de San Fernando, en Cartagena. En Norte de Santander, el teniente Juan David Ramírez fue emboscado y asesinado el 5 de abril en inmediaciones de Herrán, jurisdicción de Tibú.
En el Cauca, dos soldados resultaron víctimas de un ataque en zona rural de El Tambo el 18 de abril, cuando brindaban seguridad a una comunidad indígena. El ministro Sánchez enfatizó que estos hechos configuran un patrón criminal: “Sicarios enviados por las estructuras armadas golpearon de forma premeditada a nuestra Fuerza Pública”.
El caso más reciente ocurrió en Córdoba el 24 de abril. Dos patrulleros fueron asesinados mientras custodiaban un puesto de control en la vía Montelíbano–Montería. Un tercer uniformado resultó herido.
El gobernador Erasmo Zuleta convocó un consejo de seguridad de emergencia y anunció su intención de presentar la situación ante el presidente de la República, el ministro de Defensa y los altos mandos de la Policía y el Ejército.
Respuesta integral del Estado
Ante la escalada, el Gobierno Nacional activó una estrategia de doble componente. El 30 % se destina al refuerzo de la Fuerza Pública mediante despliegue adicional de tropas, patrullajes nocturnos, acciones de inteligencia y coordinación interinstitucional. El otro 70 % se orienta a la transformación social de los territorios más afectados.
En el departamento del Cauca, la inversión estatal contempla construcción y mantenimiento de vías terciarias, dotación de centros educativos, ampliación de cobertura en salud primaria y generación de empleo rural. El ministro Sánchez sostuvo que la acción unificada del Estado promoverá la legalidad y ofrecerá alternativas económicas a la población civil.
“Llevamos a cabo operativos militares y policiales mientras desplegamos brigadas sociales. Queremos que los caucanos encuentren en el Estado oportunidades de crecimiento, no temor ni abandono”, afirmó. El plan social incluye reforzar la atención psicosocial a víctimas del conflicto, dinamizar proyectos productivos agrícolas y ampliar la red de comunicaciones en zonas veredales.
Capturas y recompensas
El director de la Policía Nacional, general Carlos Fernando Triana Beltrán, informó la captura de ocho presuntos integrantes del Clan del Golfo en Barranquilla. Los detenidos, adscritos al Frente ‘Carlos Daniel Fulaye Vargas’, enfrentan cargos por homicidio, extorsión y narcotráfico en el área metropolitana del Atlántico. Según el oficial, dichas detenciones frustraron planes de atentados contra la Policía Metropolitana.
El general Triana anunció una recompensa de 100 millones de pesos para quien aporte información que conduzca a la captura de los responsables intelectuales y materiales de los recientes ataques. “El Estado responderá con contundencia ante estos crímenes. La sociedad debe sumarse a denunciar y desarticular las redes de apoyo a las estructuras armadas”, declaró.
