Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Otty Patiño, comisionado de Paz, defendió la polémica decisión del presidente Gustavo Petro de nombrar a 18 exlíderes paramilitares como gestores de paz, un nombramiento que ha generado intensas críticas. En una entrevista con Caracol Radio, Patiño explicó que esta medida busca avanzar en el proceso de desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), iniciado hace más de dos décadas.
El comisionado subrayó que el nombramiento de estos exparamilitares será temporal, con una duración inicial de seis meses, y se les asignará tareas en la construcción de paz, basadas en su experiencia. No obstante, aclaró que si no cumplen con las expectativas, el Gobierno tiene la facultad de revocar sus designaciones. Patiño también destacó que el nombramiento no afecta la situación jurídica de los exparamilitares, quienes seguirán sometidos a los procesos judiciales en curso.
La medida ha sido criticada por incluir a figuras como Salvatore Mancuso y Don Berna, excomandantes de las AUC, acusados de crímenes de lesa humanidad. Patiño recordó que algunos de los nombrados aún están encarcelados, y el reconocimiento como gestores de paz no implica beneficios judiciales ni la suspensión de medidas de aseguramiento, como la detención o extradición.
El comisionado enfatizó que las víctimas son el centro del proceso de reconciliación y que su participación será esencial para asegurar la efectividad de los gestores de paz. Cada uno de los nombrados contará con un plan de trabajo adaptado a los crímenes cometidos y las regiones en las que operaron.
Patiño también respondió a las críticas sobre el impacto de los nombramientos en las elecciones, asegurando que todos los gestores estarán bajo la supervisión de las organizaciones de víctimas y la sociedad civil. Recalcó que el nombramiento no debe interpretarse como un intento de eludir la justicia, sino como una medida para contribuir al proceso de paz, siempre que se respete el compromiso con la verdad y la reparación.
