Primer capturado bajo la Ley Ángel por maltrato animal en Bucaramanga
Resumen
Alexander Parra Carrillo fue detenido en Bucaramanga como el primer aplicado de la Ley Ángel, enfrentando 12 años de cárcel por tortura y muerte animal agravada. Un video y testimonios evidenciaron su crimen. La Ley Ángel fortalece la protección animal en Colombia.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
En Bucaramanga, una juez de control de garantías ordenó la reclusión preventiva en centro carcelario de Alexander Parra Carrillo, de 50 años, como primera aplicación de la Ley 2455 de 2025, también conocida como Ley Ángel, destinada a fortalecer la protección animal en Colombia.
Parra Carrillo enfrenta cargos por tortura y muerte a animal agravada, sanción que contempla hasta 12 años de prisión.
El crimen ocurrió el 7 de mayo en el suroccidente de Bucaramanga. De acuerdo con la Fiscalía, Parra Carrillo sujetó una cuerda al cuello del gato “Michín”, la tensó durante varios minutos y provocó su fallecimiento.
La agresión quedó registrada en un video difundido en redes sociales, pieza clave para vincular a Parra Carrillo a la investigación.
La Policía Nacional ubicó al acusado en vía pública y lo llevó ante la Fiscalía. El ente acusador presentó como pruebas el video, testimonios de vecinos y el informe forense, que confirmó lesiones compatibles con estrangulamiento.
La Juez Octava Penal de Garantías consideró que el sujeto representa un grave peligro para la sociedad y avaló la medida de aseguramiento carcelario.
Durante la audiencia, Parra Carrillo negó su responsabilidad y afirmó que solo “espantó” al animal. En su versión, “no le toqué un pelo” y calificó de “alegres” las reacciones de los fiscales al verlo imputado.
El alcalde Jaime Andrés Beltrán celebró la decisión en su cuenta de X: “Esta norma protegerá a los animales del país. Bienvenida la #LeyÁngel. Quienes maltraten recibirán todo el peso de la ley”.
El concejal Camilo Machado, uno de los denunciantes, destacó la sevicia del hecho como agravante y advirtió que Bucaramanga envía un mensaje firme contra el maltrato: “Quienes cometan actos de crueldad pagarán con cárcel”.
El caso marca un hito en la aplicación de la Ley Ángel y sienta un precedente para futuros procesos contra el maltrato animal en Colombia.
