Resumen
La Procuraduría General de Colombia advierte de la precaria situación humanitaria de migrantes en la ruta Cúcuta-Bucaramanga, con falta de apoyo y presencia de grupos armados. Pide a las autoridades acciones urgentes para brindarles ayuda y protección.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La Procuraduría General de la Nación ha lanzado una advertencia urgente sobre la situación humanitaria precaria que enfrentan los migrantes en la ruta desde Cúcuta hasta Bucaramanga, instando a las autoridades a tomar medidas inmediatas para brindarles ayuda y protección.
En un recorrido realizado por la ruta del migrante, Javier Sarmiento, procurador delegado para los derechos humanos, lideró un equipo especializado en temas de migración para evaluar la situación de primera mano. Lo que encontraron fue alarmante: 72 pasos informales a lo largo de la ruta y una completa ausencia de puntos de atención humanitaria.
"No se ha encontrado ningún tipo de ayuda humanitaria: no hay hogares de paso, puntos de hidratación o alimentación, ni ayuda médica", señaló Sarmiento en una entrevista con Caracol Radio. Esta falta de atención representa una amenaza inminente de crisis humanitaria, especialmente para los dos departamentos involucrados.
Con el cierre de algunos puntos de cooperación internacional y el aumento constante del flujo migratorio, la situación se vuelve aún más urgente. "El 30 % de los migrantes son menores de edad que no están acompañados de sus padres", agregó Sarmiento, resaltando la vulnerabilidad de esta población.
Se estima que al mes transitan más de 2.300 migrantes entre los departamentos de Santander y Norte de Santander. La Procuraduría ha convocado a una mesa de trabajo con Migración Colombia, el Gobierno Nacional, los gobernadores y alcaldes de la región para abordar esta crisis y buscar soluciones inmediatas.
"Las autoridades no están haciendo una presencia robusta, ni se está haciendo el control por estas trochas", expresó el procurador delegado. La falta de atención en los puntos informales de la ruta ha facilitado la presencia de grupos armados y el cobro ilegal por el paso, poniendo en riesgo la seguridad de los migrantes.
Es crucial establecer centros de atención fronteriza con suministro de alimentación, refugio y alojamiento temporal para mitigar esta crisis en crecimiento. La Procuraduría insiste en que se deben tomar medidas urgentes antes de que la situación empeore aún más.
