Recrudeció la violencia en el Catatumbo: 117 muertos y más de 64 mil desplazados

La región del Catatumbo enfrenta la peor crisis de derechos humanos de los últimos años, según un informe presentado por la Defensoría del Pueblo, que alertó sobre un recrudecimiento de la violencia con un saldo de 117 muertos, 64.783 personas desplazadas y múltiples violaciones al Derecho Internacional Humanitario (DIH).

La defensora del Pueblo, Iris Marín, fue la encargada de socializar el documento en Cúcuta, advirtiendo que la situación sigue siendo crítica debido a la confrontación armada entre la guerrilla del ELN y las disidencias del Frente 33 de las FARC, conflicto que comenzó el pasado 16 de enero. “Continúa la situación de crisis y conflicto armado”, expresó Marín, precisando que Tibú y El Tarra son los municipios más afectados, aunque también destacó la consolidación territorial del ELN en zonas como Ocaña, Convención y Sardinata.

El informe, titulado ‘El Catatumbo después de la crisis: desafíos en Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario’, documentó además el uso de métodos de guerra no convencionales, como drones explosivos y minas antipersonal cerca de instituciones educativas, además de agresiones directas contra comunidades indígenas y firmantes de paz.

La defensora del Pueblo advirtió: “Estamos viendo no solo homicidios y desplazamientos, sino también confinamientos forzados, violencia sexual, trata de personas, reclutamiento de menores y ataques sistemáticos a líderes sociales y defensores de derechos humanos. La situación es extremadamente delicada y requiere una respuesta contundente”.

El reporte señala que, durante las primeras semanas del conflicto, hubo cerca de 70 homicidios y más de 54.000 desplazados, pero las cifras han seguido aumentando en los meses posteriores, profundizando la crisis humanitaria. Además, Marín destacó el riesgo latente de expansión del Clan del Golfo, también conocido como el Ejército Gaitanista de Colombia, hacia el Catatumbo.

“Hay un riesgo que no es solo una situación real y actual, pero es un riesgo: la expansión del Clan del Golfo, que viene avanzando desde el sur de Bolívar, el sur del Cesar y el Magdalena Medio. Se deben mantener las medidas de la fuerza pública para evitar que ese grupo ingrese y agrave aún más la situación”, subrayó.

El informe concluye con un llamado urgente al Estado para redoblar esfuerzos en garantizar el retorno seguro de las comunidades desplazadas y reforzar la protección de los líderes sociales.