Resumen
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Las autoridades colombianas llevaron a cabo la detención de cuatro personas en San Gil y San Vicente de Chucurí, quienes eran parte de una banda acusada de enviar armas y cocaína a Ecuador y otros países centroamericanos, según informó la Fiscalía.
La red en cuestión, señalada de suministrar armas a organizaciones criminales con alcance internacional y de comercializar cargamentos de cocaína a grupos narcotraficantes encargados de distribuirlos en destinos internacionales, fue desarticulada en operaciones en los municipios de San Gil y San Vicente de Chucurí, en el departamento de Santander, y en Chigorodó, Antioquia.
Los miembros de esta banda supuestamente obtenían fusiles Galil y M16, pistolas y municiones de distintos calibres de redes internacionales y los vendían a grupos del Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), la principal organización criminal del país, en la región de Urabá, en Antioquia.
Además, se dedicaban a transportar armas ocultas en tractocamiones a zonas fronterizas, donde eran recibidas por organizaciones delictivas con influencia en Guayaquil y otras ciudades de Ecuador.
Estas personas también enfrentan acusaciones de venta de cocaína, producida en laboratorios clandestinos en los departamentos de Antioquia y Cauca, a intermediarios narcotraficantes que la enviaban a Venezuela, México y países centroamericanos. La red exigía a los compradores de droga dejar garantías de pago, como terceras personas, y se comprometía a no causar daño si la droga llegaba a su destino y se cumplía con el pago acordado.
Los detenidos, identificados como Roberto Amaya Blanco, Juan Carlos Mazo Castañeda, Jhon Bayron Linares Fuentes y Luz Andrea Fuentes González, fueron imputados por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, conductas agravadas. Los acusados no aceptaron los cargos y fueron enviados a prisión.
