Resumen
Kirstie Flood y Jeffrey Meyers fueron condenados por su papel en la muerte de Fallon Fridley, de 2 años. Flood, amiga de la madre de la niña, recibió cadena perpetua por asesinato en primer grado. Meyers fue sentenciado a 15 años por asesinato en segundo grado por no detener el abuso.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Un juez del área de Atlanta ha impuesto duras sentencias a Kirstie Flood y Jeffrey Meyers por su papel en la muerte de Fallon Fridley, de 2 años, en 2020. Flood, amiga de la madre de la niña, golpeó brutalmente a a su hija, mientras que Meyers no hizo nada para detenerla, según las autoridades.
Flood se declaró culpable de asesinato en primer grado, mientras que Meyers se declaró culpable de asesinato en segundo grado. Flood fue condenada a cadena perpetua, mientras que Meyers recibió una sentencia de 15 años.
Según la policía, antes del incidente, Flood buscó en su teléfono información sobre abuso infantil. Durante el ataque, Meyers permaneció inactivo mientras Flood golpeaba a Fallon. A pesar de los intentos de Flood de atribuir las lesiones de la niña a una caída accidental en el patio de recreo, las autoridades determinaron que las lesiones eran consistentes con un trauma masivo.
La madre de Fallon, Kristin Fridley, expresó su dolor durante la audiencia de sentencia, describiendo cómo la pérdida de su hija ha destrozado su vida, según Law&Crime.
Fallon fue descrita como “un ángel absoluto en la tierra” en su obituario, que también mencionaba su amor por su gatito, el Sr. Butters, y su animal de peluche favorito, Lovey. Una cuenta de GoFundMe creada en su memoria la describía como una “niña hermosa con toda la vida por delante”.
La madre expresó su dolor
Durante la audiencia, Kristin Fridley expresó su dolor y sufrimiento por la pérdida de su hija. Según WSB, afiliada local de ABC, Fridley dijo al juez:
“Las acciones del acusado el 9 de diciembre de 2020 destrozaron mi mundo. Mi vida dio un vuelco total. Todo lo que tenía me lo robaron. Las palabras no pueden expresar la profundidad de mi dolor. Los días, semanas y meses posteriores fueron todos una pesadilla. Mi hermosa y dulce hija de dos años fue asesinada por alguien a quien yo consideraba uno de mis mejores amigos”.
La muerte de Fallon ha conmocionado a la comunidad local, que ha expresado su apoyo a la familia en este momento difícil. La brutalidad del crimen ha dejado a muchos preguntándose cómo pudo ocurrir algo así.
La investigación policial ha revelado detalles impactantes sobre el comportamiento de los acusados antes y durante el incidente, lo que ha generado un debate sobre la protección de los niños y la responsabilidad de quienes los cuidan.
